Con miles de feligreses que presenciaron las catorce estaciones de la pasión y muerte de Jesucristo, se llevó a cabo este viernes el tradicional viacrucis en su trigésima sexta edición por la agrupación "Viacrucis, Camino a la Cruz", la cual es coordinada por la iglesia del Sagrado Corazón de Jesús.
Incluso, desde el jueves por la noche, se inició con esta gran pasión al presencia la última cena en la plaza de armas, en donde participaron 50 actores de esta agrupación que es coordinada por Marvin Josué Quinta Armijo y Martín Ulloa Bermejo.
Te puede interesar: Protección Civil ha retirado más de 30 menores de canales de riego
Cabe hacer mención que este viernes 7 de abril, a partir de las once horas, dio inició el tradicional viacrucis en las afueras de la iglesia del Sagrado Corazón de Jesús, para trasladarse por casi tres kilómetros a la iglesia del Cerrito de la colonia San Isidro, en donde se realizó la crucifixión y muerte de Jesús.
Cabe citar que para el viacrucis, como cada año se tomó la avenida Francisco Sarabia para dar vuelta a la derecha y seguir por la calle Allende que los llevó por medio de las 14 estaciones hasta llegar a la iglesia del Cerrito de la colonia San Isidro.
Es justo mencionar que en cada estación los 50 actores dieron lo mejor de sí, a fin de cumplir con sus papeles para representar la pasión y muerte de Jesucristo, quien dio la vida por todo el mundo al sacrificar y cumplir con su obediencia a Dios.
Para este año, el papel de Jesús fue representado por segundo año consecutivo por Ángel David Serna Quinta de 21 años de edad y quien cursa el sexto semestre de medicina en la Facultad de Ciencias de la Salud (FACSA) de la Universidad Juárez del Estado de Durango (UJED).
Los coordinadores hicieron hincapié que desde el año 1988 vienen realizando el tradicional viacrucis por la agrupación "Viacrucis Camino a la Cruz", el cual se lleva de manera coordinada por la iglesia del Sagrado Corazón de Jesús.
Finalmente, se resaltó que una de las cosas más importantes es seguir teniendo fe en Jesucristo y ser obedientes a su palabra para poder tener una vida con mayor paz, así como ser compasivos por el amor al prójimo.