Un doloroso incidente ha causado indignación en Monclova, Coahuila, donde la familia Salazar se enfrentó a una dolorosa experiencia durante la velación de Osmel Salazar, un joven que falleció en la mañana del 24 de octubre.
La familia, devastada por la pérdida de Osmel, denunció a la Funeraria Latinoamericana por lo que describen como una presunta negligencia. Durante el velorio, el cuerpo del joven comenzó a desprender líquidos y malos olores, lo que llevó al sellado prematuro del ataúd y dejó a los familiares sin poder despedirlo como deseaban.
La tragedia comenzó la mañana del martes cuando Osmel Salazar se quitó la vida en la casa de su padre, ubicada en la colonia Primero de Mayo. Sus familiares encontraron su cuerpo sin vida alrededor de las 09:00 horas y dieron parte de inmediato a la Fiscalía General del Estado.
Los profesionales del Servicio Médico Forense se hicieron cargo del cuerpo y finalmente lo entregaron a la Funeraria Latinoamericana, que ofrecería el servicio de velación. La indignación surgió cuando la capilla tardó más de 12 horas en preparar el cuerpo, entregándolo finalmente a las 23:00 horas en la vivienda de la familia, ubicada en la calle Nueva de la Zona Centro.
Desconsolados por la pérdida de Osmel, los familiares lo acompañaron en sus últimas horas. Sin embargo, alrededor de las 03:00 horas, notaron que el cuerpo de Osmel comenzó a desprender líquidos, parecía sudar y sus prendas estaban húmedas. Además, su boca se abrió y un mal olor impregnó la vivienda.
Los malos olores se volvieron insoportables, y la familia notó la presencia de moscas alrededor del cuerpo del joven. Solicitaron la intervención del personal de la funeraria, quienes justificaron la situación alegando que el cuerpo se estaba descomponiendo y requería ser sellado de inmediato.
El ataúd fue cubierto con un plástico, lo que solo aumentó la indignación de la familia. A pesar de la molestia, continuaron con la velación hasta las 16:00 horas del miércoles. Finalmente, el cuerpo de Osmel fue sepultado después de una misa de cuerpo presente que se realizó en la capilla Santiago el Menor.
La hermana de Osmel, Yahaira, reveló a los medios de comunicación que el servicio funerario tenía un costo de 23 mil pesos, de los cuales ya habían abonado ocho mil pesos y entregado otros tres mil 500 este miércoles. Solicitó a la Funeraria Latinoamericana que condone la deuda debido al pésimo servicio que recibieron y la forma inapropiada en que su hermano fue despedido debido a la presunta negligencia de la funeraria.
La familia Salazar espera que su experiencia dolorosa sirva como un llamado de atención sobre la necesidad de una mayor responsabilidad y profesionalismo en el sector funerario.