Los integrantes del Congreso Agrario Permanente (CAP) de Coahuila denunciaron el abandono en el que los tiene el Gobierno Federal y sus funcionarios relacionados con el campo, debido a que en 2025 se destinarán ceros pesos al apoyo a la producción ejidal. Además, señalaron que los recursos anunciados en el presupuesto de egresos están destinados principalmente a mantener a la burocracia de la SADER, SEDATU, RAN y la Conagua, entre otras dependencias.
Ana Eloísa Ramírez detalló que los recortes a los campesinos, en este caso en Coahuila, comenzaron desde 2019, presentándose de manera gradual con porcentajes de reducción del 20 al 30% anualmente, hasta llegar a los cero pesos para este 2025.
La coordinadora del CAP en Coahuila aseguró que todos los recursos que les han sido recortados han generado que hoy México no produzca ni el 50% de los alimentos básicos que se requieren para las familias del país, lo que ha convertido a la nación en dependiente del extranjero. “La producción en el campo debe ser un caso de seguridad nacional”, subrayó.
“Nos quitaron los apoyos bajo el pretexto de que había corrupción entre los campesinos, pero no, esa no fue la realidad. Los desaparecieron creando organismos como Segalmex y Sembrando Vidas, que no sirven para nada. Con ese dinero lo que hicieron fue sembrar votos”, afirmó.
Destacó que, si existían instituciones que garantizaban la transparencia y la aplicación de los recursos destinados a los campesinos, les recortaron el dinero que les correspondía para la producción y lo aplicaban de manera discrecional. “¿Ahora qué va a pasar al desaparecer esos órganos?”, cuestionó.
Ramírez detalló lo anterior en rueda de prensa momentos antes de iniciar una reunión del Congreso Agrario de Coahuila, denominada mesa productiva y de certeza jurídica. A la reunión se invitó a funcionarios de las diversas dependencias federales relacionadas con el campo, pero ninguno acudió.
Enfatizó que de esta manera se rompe todo diálogo con las familias del campo en Coahuila, las cuales enfrentan un “vía crucis” al ser enviadas de dependencia en dependencia sin que nadie resuelva lo relacionado con el pago de los apoyos del Procampo de este año.
“Al agotar las vías de conciliación, se genera un problema social, y a partir de 2025, los campesinos de Coahuila comenzarán a manifestarse de diferentes maneras, todos unidos, porque en el CAP no existen colores ni partidos”, manifestó.