Los integrantes del Grupo Empresarial de la Laguna y el Consejo Lagunero de la Iniciativa Privada acordaron sugerir a los bancos buscar nuevas alternativas de atención en sus instalaciones y la reapertura de algunas de las sucursales que se encuentran cerradas, pues el mecanismo adoptado para brindar servicio a los cuentahabientes durante la contingencia ocasionada por el Covid-19 se ha descontrolado y pone en riesgo a los ciudadanos que acuden a realizar alguna operación monetaria.
Señalan que este esquema ocasiona grandes filas en las que no se respeta la sana distancia, el tiempo de espera es largo, la ciudadanía padece las altas temperaturas que se registran en la región y además se expone a sufrir asaltos al encontrarse afuera de las instituciones bancarias con dinero en efectivo en su poder.
Por ello, advierten que el trato a los clientes llega a resultar inhumano, considerando que incluso personas de la tercera edad deben soportar largas horas parados y bajo las inclemencias del tiempo.
Los representantes del sector empresarial son conscientes de que las medidas adoptadas por los bancos, como la reducción del personal y el cierre de algunas sucursales, son básicas y necesarias para preservar la salud del personal y sus familias, sin embargo, advierten que en las instituciones bancarias de alta demanda se observan diariamente largas filas desde muy temprano. Mencionan que en la mayoría de las sucursales sólo entran pequeños grupos de personas para realizar sus transacciones, mientras que el resto de los clientes debe esperar su turno en el exterior.
Por esta razón, los empresarios piden a la Asociación Nacional de Bancos generar nuevas estrategias de atención que no pongan en riesgo a la población al exponerla a un contagio de COVID-19 o incluso a un atraco.
Señalan que los cuentahabientes mexicanos merecen un trato digno, toda vez que la banca mexicana es muy redituable para las instituciones financieras, pues el 30 por ciento de sus ingresos en el país provienen del cobro de comisiones, de acuerdo a la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros.
Para ello, el sector empresarial sugiere reabrir algunas de las sucursales que se encuentran cerradas y los cuentahabientes tengan a su disposición diversas opciones para realizar sus operaciones bancarias, aminorando así el problema de las altas concentraciones. Aunado a ello, recomiendan buscar un esquema de atención más rápido y establecer estrategias de orden para los cuentahabientes que esperan su turno, de tal manera que puedan mantener el distanciamiento y se eviten complicaciones. Incluso, declaran que el hecho podría exponerse ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos para que sea este organismo quien analice el caso y emita una recomendación al respecto.
Los empresarios agregan que el objetivo más importante durante la contingencia es mantener la salud pública, y para alcanzarlo, es necesario que todos los sectores asumamos nuestra responsabilidad como prestadores de servicios indispensables para la población, implementando las medidas de higiene y seguridad necesarias para que clientes, personal y ciudadanía en general pueda acudir a los establecimientos sin correr el riesgo de contagio.
