Gómez Palacio, Durango. - Este lunes al filo de la 1:00 de la tarde, al interior de la Academia Villa de Matel se inauguró una galería fotográfica que narra la historia de esta institución. Se trata de una narrativa en imágenes a lo largo de 113 años de la institución montada en 28 mamparas donde se reflejan los momentos significativos de este complejo educativo.
María Esther Gamboa, Directora de la Academia agradeció a padres de familia y a las mismas religiosas que han sido parte importante de la Academia que en sus inicios llevará el nombre de “Academia del Verbo Encarnado”, dado a todos los Colegios que fueron fundando en sus inicios las religiosas del verbo encarnado, procedentes de Francia y establecidas en Brownville, Texas, convirtiéndose hasta la fecha en un complejo educativo y religioso donde se da formación a niños y jóvenes.
Dijo que en este ‘túnel del tiempo´ se refleja el trabajo a conciencia que sembró una buena semilla y hoy tiene resultados.
En la inauguración se contó con la presencia del Padre Julio Carrillo Gaucin, vicario episcopal vicario episcopal de la Diócesis de Gómez Palacio; del Padre Filiberto Campos, capellán del Pueblito y Juan Fabián Vázquez Flores, también religioso de la catedral de nuestra Señora de Guadalupe.
También se contó con la presencia de los representantes de padres de familia en los señores Manuel Cecilio Vázquez y Alejandra Sotelo Hernández. Así como la hermana responsable de la galería María del Socorro Soto Mora.
Estuvieron presentes dos íconos de la Academia Villa de Matel, las hermanas Goretti y Martha quienes son las religiosas de mayor edad y testigos del cambio generacional de la institución, para quienes pidieron un aplauso como homenaje a su destacada labor.
Recordaron también que gracias a la generosidad de la Familia Lavin en Gómez Palacio, quienes donaron el terreno donde se llevó a cabo la construcción de este majestuoso recinto del saber y al trabajo conjunto de las autoridades eclesiásticas, las religiosas y alumnos se edificaron hombres y mujeres con grandes valores.
Tras un recorrido por la galería fotográfica, todos los presentes compartieron el pan y la sal en el Salón ‘Juan Pablo II’.