Gómez Palacio, Durango.- Aún cuando ya estaba programado que para este 2020 la producción del sector campesino caería en un 35% en tres años, por la reducción presupuestal planeada por la actual administración federal, los campesinos avizoran mayores dificultades, luego que por la pandemia, el tema de salud se verá fortalecido a costa de otros programas que serán recortados, entre ellos aún más el del sector campesino.
Al respecto, el líder de la CNC en Gómez Palacio, Hipólito Pasillas Ortiz, comentó que ya están acostumbrados a "apechugar" y más cuando se requiere en está emergencia sanitaria, "así que es nuestro granito de arena el sacrificio que haremos para seguir cosechando a cuentagotas".
Los ejidatarios laguneros recibieron 900 millones de metros cúbicos de agua proveniente de las presas duranguenses, de los cuales ya se aplicó un 25% en el primer riego.
"Es insuficiente para muchos, pero aún así iniciaron con la tarea de sembrar forrajes (sorgo y maíz) que habrán de colocar en el mercado local, ya que el virus, obvio que aplazará las negociaciones que tienen con otras entidades por miedo al contagio, ya que supuestamente la reactivación económica, vendrá hasta después de septiembre", dijo.
Esta pandemia, asumió, también impide que los recursos fluyan a tiempo, porque el campo requiere a la vez de apoyos y subsidios para semilla, fertilizante e insecticidas para lograr una buena producción y venta.
Sabemos que el tema de salud es primero, el de mayor importancia y es comprensible, sin embargo, esperamos que una vez pasada la contingencia, se reactiven los apoyos.
Mientras, aceptó, quienes son del campo y están suspendidos temporalmente de sus trabajos en la mancha urbana, pues viven al día y con las despensas que dos regidores del ayuntamiento gomezpalatino les hacen llegar.
Los indicadores en la agricultura, que sabemos es un tema de seguridad social nacional, van en sentido contrario y por ello, esperamos que pasado el riesgo nos tomen en cuenta, aunque muchos no lo interpretan así y por lo tanto, lo que se vulnera es la producción, en nuestro caso los cultivos de maíz y sorgo, los forrajes de mayor demanda.
Dice que el sector agropecuario sufre un desmantelamiento y deterioro, que no sólo pone en riesgo la cosecha vigente, sino la sanidad e inocuidad.
"Ojalá que no sea otra promesa más de reactivar el campo ya que urge que nosotros también recurramos al programa de autosuficiencia alimentaria, que es el compromiso para muchos", finalizó.
