Arturo Macías Pedroza, vicario general de la Diócesis de Gómez Palacio, fue claro al decir que sin el Presidente de México o con él, la comunidad católica buscará reconstruir la paz, porque “la paz hay que producirla, no es una acción nuestra, es un regalo de Dios”.
Reclamó que el “que quieran abrazar, (está) muy bien, pero eso no es su trabajo, su trabajo es controlar la violencia”.
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Declaró que “nosotros enterramos a los muertos, nosotros recibimos a los llantos de la gente que sufre por el hijo que le han robado, el hijo que le han matado, nosotros sentimos en el corazón nuestro el sufrimiento de los que han vivido la desaparición de alguien; no somos un gremio más, somos el filtro donde llega todo el sufrimiento, somos la respuesta, debemos ser la respuesta ante esas angustias”, concluyó.
En el marco de lo que serán unas ‘Jornadas de oración por la paz’ en todo México, tanto la Diócesis de Torreón como de Gómez Palacio, ya giraron la invitación para que este próximo domingo 10 de julio se esté realizando una Misa en memoria por los sacerdotes asesinados en la República Mexicana. Durante todo el mes se estarán llevando a cabo diversas actividades.
Macías Pedroza dijo que, si el Gobierno quiere que le ayuden desde la comunidad católica o no, ellos seguirán realizando su trabajo pastoral como lo han venido haciendo desde todos los rincones del país y el mundo.
En este sentido, para la Diócesis de Gómez Palacio también ha representado un reto todos los días para generar las condiciones de un ambiente de paz y armonía en la sociedad.
Jornadas de Oración por la Paz
Por su parte, el Obispo de Torreón, Luis Martín Barraza Beltrán, dio a conocer que la carta fue recibida por parte de la Conferencia de Episcopado en la que se les pide realizar diversas tareas espirituales durante este mes de julio, en las cuales se harán misas especiales, así como algunas jornadas en pro de la paz.
“Por lo pronto yo les hice llegar a todos los sacerdotes la carta de la Conferencia de Episcopado en la cual indicaba esta Jornada de Oración por la paz para el próximo domingo para que se haga memoria de todos los consagrados presbíteros que han sido asesinados”, destacó.
Dejó entre ver que se hará memoria de todos en general, eso será para el domingo, posterior a esta fecha se tienen programadas misas en las diferentes parroquias para recordar también a la sociedad en general como activistas.
“En adelante dice que se celebren misas aplicadas recordando no a sacerdotes sino a otra gente como activistas sociales de todos los demás asesinatos que hayan existido, para concluir el último domingo del mes que es el 31, se hará una oración por los asesinos que han segado la vida de algunas personas, son seres humanos, oramos para seguir insistiendo en la conversión”, recordó.
Reiteró que el tema de la violencia es complejo, “no se trata de que cada quien raje leña de este problema, no buscar culpables, sino, los creyentes decimos, estamos en las manos del señor y Dios lo puede todo, vamos poniendo también las condiciones para hacer nuestra parte y entrar en un diálogo de una reconciliación, mandar un mensaje de que todos estamos comprometidos por la paz”, refirió.
Cuestionado sobre el papel que desempeña la Iglesia en este tipo de temática sociales, admitió que la paz se construye todos los días y ha sido la Iglesia católica quien ha pugnado por construir en lugar de destruir.
“Vamos a tomar más en serio la responsabilidad que le toca a uno”, añadió.
“El domingo pasado el evangelio decía que anunciáramos la paz donde quiera que fuéramos, les decía a sus discípulos, es un mensaje que entendemos todos los creyentes; es un compromiso que debemos estar haciendo siempre, esta circunstancia nos urge, nos apremia pero que tampoco sirva todo esto para hacer otro tipo de violencia; empezamos a echar culpas para todos lados”, reiteró.