La presidenta municipal, Marina Vitela, condenó el feminicidio de una maestra en su domicilio del fraccionamiento San Antonio, y se pronunció porque la investigación sobre este caso llegue hasta las últimas consecuencias, con la detención del o los responsables y el castigo que la ley establece.

Además, se refirió a la urgencia de implementar acciones transversales por parte de los tres órdenes de gobierno, que permitan un trabajo conjunto y coordinado para erradicar la violencia que sufren las mujeres en el país y en el mundo.

Consideró que estos hechos son de los que más indignan en el municipio, el país y en el mundo, pues las mujeres siguen siendo vulneradas, prueba de ello es que no se respeta edad ni condición, como reflejan estos lamentables hechos.

Destacó la importancia de que las autoridades que investigan estos crímenes, lleguen hasta las últimas consecuencias y no queden en la impunidad, pues de lo contrario seguirán ocurriendo estos actos tan aberrantes en los que incluso niñas han resultado víctimas.

Consideró que todos tenemos una gran responsabilidad frente a este grave problema, por lo que en caso de su Administración, se ha estado trabajando e insistiendo en disminuir y erradicar cualquier forma de violencia en contra de las mujeres, mediante la puesta en marcha de proyectos transversales en los que se involucran diversas dependencias.

El Instituto Municipal de la Mujer desarrolla distintas actividades en universidades, en coordinación con la Dirección de Seguridad y Protección Ciudadana, como seguimiento al Plan Municipal de Desarrollo y los programas de trabajo que se tienen en materia de atención a las mujeres.

También se han tenido acercamientos con deportistas, empresarios y diversos sectores, además de insistir en la importancia de prevenir la violencia, mediante acciones coordinadas con otras dependencias estatales y federales.

La presidenta, Marina Vitela consideró que como sociedad, todos somos responsables del problema y estamos involucrados, de manera que un primer respondiente ante un hecho de esta naturaleza no debe ser precisamente alguna autoridad, sino cualquier persona o trabajador que sea testigo o atienda a mujeres que pidan auxilio al encontrarse en una situación de peligro.

Destacó que si bien Gómez Palacio se puede considerar un municipio seguro a nivel nacional, acciones como la que ocurrió el pasado fin de semana, en la que la maestra fue asesinada a puñaladas en su propia casa, manchan esa imagen.