En vez de un acueducto, construir pozos

Geólogos con nuevo proyecto; Raymundo resulta una buena opción

César Acosta Amaya

  · lunes 29 de julio de 2019

Geólogos laguneros no aceptan un acueducto / Sofy Ramírez

Fundación “Salvando al Desierto”, tiene como proyecto perforar pozos profundos en batería en los alrededores de Raymundo, lo que resultará una excelente opción para atraer agua a la Laguna, abastecer con lo suficiente a la población y con ello terminar con el desabasto que se convierte en un problema en la comarca lagunera.

Esta organización la integran Jorge Castañeda Nené, geólogo con posgrado en geo-hidrología de la Escuela de Minera Metalúrgica de la Universidad Autónoma de Coahuila, además de Jesús Orona Flores y Alberto Núñez, biólogo.

Dicen que la propuesta de López Obrador de traer agua de las presas a través de un acueducto para abastecer la zona urbana, es cara, porque son 10 mil millones de pesos, “por ello otra alternativa de perforación de pozos profundos en batería en los límites del Parque Raymundo con una profundidad de bombeo a 60 metros (cuando lo normal en la actualidad es a 500 metros), sería la solución”.

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Dicen que esto traería consigo un ahorro significativo en el costo por energía eléctrica, ya que mientras más hondo se perfore es más costosa la obra.

Afirman que la propuesta del presidente de la república, Andrés Manuel López Obrador, resultaría más cara, porque se requiere de una verdadera potabilización del agua, ya que llegaría con filtraciones con residuos de arena, gravas y piedra granulada.

Por ello, destacaron la importancia de consultar a los especialistas en hidrología, tomando en cuenta que en la comarca lagunera, ningún organismo operador de agua tiene un geólogo experto y quienes deben saber por lógica que traer agua de las presas, representa un alto costo económico y ecológico, porque esa agua dejaría de filtrarse.

Recordaron que a esa agua se le denomina acuífero Villa Juárez, el cual recibe tres recargas por año y afirman que de los 1054 millones de metros cúbicos que se destinan para los programas de riego en materia agrícola, han encontrado que se pierden 184 mil metros cúbicos.