Gómez Palacio, Durango.- Con el propósito de ser los primeros en recibir la segunda dosis de la vacuna contra el Covid-19, hubo jóvenes que ‘hicieron de todo’ para asegurarse de estar lo más adelante posible de la fila al exterior de la Expo Feria, donde se llevó a cabo la jornada de inoculación para el grupo de 18 a 29 años de edad, como fue el caso de Alondra Saavedra, quien llegó desde las 7:30 de la tarde del día anterior, logrando acomodarse como la número uno entre la gente que acudió, presentándose además la situación de los hermanos Carlos y Héctor, que se llevaron su tienda de campaña, apostándose a las afueras de la Expo desde las tres de la madrugada, y así, cómodamente esperar su turno.
“Llegué a las 7:30, casi 8:00 de la noche del día de ayer (martes), en la primera dosis llegué a las 11:30 (noche), pero ya había bastante gente, en esta ocasión decidimos venirnos más temprano, para ser de las primeras, si salimos un poquito tarde la vez pasada, por lo que nos venimos más temprano para ser de las primeras en salir y no asolearnos, porque hoy (miércoles) empiezan a vacunar más tarde”, expuso Alondra Saavedra, quien dijo ser habitante del ejido La Popular.
Con la primera dosis, la joven gomezpalatina tuvo una fuerte reacción y se puso un poco mala de salud, afortunadamente el efecto pasó y con todo el entusiasmo acudió a la aplicación de la segunda, en la que logró ser la primera del grupo: “fui la primera, me puse a platicar con los que empezaron a llegar, a sacar plática o intentar dormir, ya que no se puede dormir del todo bien, pero sí a descansar, aunque sea un poquito, fue estar viendo redes sociales”.
Durante la madrugada, Alondra pudo darse cuenta de los rondines que realizaban las unidades de la policía municipal, en los alrededores de la Expo; el tiempo pasó y ya muy temprano ‘se echó’ un cafecito y un pan para desayunar, mandando un mensaje a los jóvenes que no han acudido a vacunarse: “que se vacunen, que es algo muy importante, esencial, y no hacer caso a comentarios que por ahí se dicen, ante todo es la salud”.
Otro caso que llamó la atención, fue el de los hermanos Carlos y Héctor, de 29 y 28 de edad, quienes se llevaron su casa de acampar y algunas cobijas para pasar la noche:
“Desde las tres y media estamos aquí, pues para no estar en el sol, en la primera dosis fue igual, desde las tres de la mañana llegamos. Vamos a ser de los primeros 30 o 50 (en la fila), ya había gente (al llegar), como unas 10 personas”, comentó Carlos, indicando que su trabajo lo realiza el fin de semana, por lo que no tuvo problema para desvelarse y esperar la vacuna.
Por su parte, Héctor comentó que fue preferible madrugar y no pasar horas bajo el intenso sol aguardando su turno: “como dice mi hermano, es mejor pasar aquí en la noche, en la sombrita, en el fresco, que en el día o en la tarde, en el sol, quema mucho y no hay ninguna sombra”.
El joven agregó que la vacunación es un tema de responsabilidad de todos, para cuidarse uno mismo y cuidar de los demás: “a la gente le digo que se anime y se venga a vacunar, que es necesario, más que nada, para cuidarse y cuidar a los demás, a la gente con la que convivimos”.
Como Alondra, Carlos y Héctor, en cada jornada de vacunación, son muchas las personas que buscan el mejor lugar para recibir su respectiva dosis, sin importar las inclemencias o circunstancias que tengan que padecer, al llegar con demasiado tiempo de anticipación, señalando la gente que vale la pena, al tratarse de una situación en la que va de por medio la salud y vida de todos.