Gómez Palacio, Durango. - El obispo de la Diócesis de Gómez Palacio, Jorge Estrada Solórzano, reafirma las palabras de su vicario general, Julio Carrillo Gaucín, en el sentido de que la iglesia no vive en la riqueza, y que ahora que las aportaciones (limosnas) se han reducido hasta en un 90% tendrán serios problemas económicos para sostener la diversidad de actividades católicas.
Añadió que más de 25 parroquias de las 38 que hay en la Diócesis de Gómez Palacio, enfrentan una situación económica adversa por la cancelación de las misas dominicales, asumió.
Son escasas las aportaciones de los feligreses y las ofrendas que envían otros sectores, efecto de la pandemia, lamentó.
"La iglesia católica en México, afronta una situación difícil porque bajaron hasta en un 90 por ciento las limosnas, ante la cancelación de las misas los domingos".
Incluso reconoció, hay parroquias como las de San Juan de Guadalupe, Simón Bolívar y, Santa Clara que dependen de las limosnas durante los domingos. Estrada Solórzano comentó que las parroquias y capellanías, tienen gastos por servicios básicos, pero también hay trabajadores que cobran un sueldo, pero más allá, se les cubre el seguro social.
“A pesar de lo que muchas personas piensan, de que en la iglesia católica se vive en la riqueza, es una mentira, porque la mayor parte de las parroquias se sostienen con limosnas del día, aunque hay algunas que hacen un guardado”.
Por otro lado dijo que hay templos como la de San Pedro del Gallo, San Juan de Guadalupe, Simón Bolívar y Santa Clara, que dependen de la llegada en semana Santa de familiares de gente de esas comunidades que radican en los Estados Unidos y que por supuesto hacen aportaciones importantes.
"El sostenimiento de las iglesias se complica, porque no hay aportaciones económicas, pero también porque están suspendidas las misas de 15 años, bodas, confirmaciones, entre otras.
