Gómez Palacio, Durango. – Luego de que el dirigente de Morena, Alfonso Ramírez Cuéllar, ha propuesto que sea el Instituto Nacional de Estadísticas y Geografía (INEGI), quien mida la capacidad financiera de cada ciudadano, yendo a su casa a observar qué es lo que tiene y cuánto vale, para el PRD es una decisión equivocada porque el problema está en las grandes empresas evasoras, las cuales hacen un gran daño al país, aunque revisarlas le corresponde al Servicio de Administración Tributaria (SAT)
Cecilio Campos Jiménez, dirigente de esta corriente política en Gómez Palacio, añadió que ante este escenario de recesión económica, ahora más gravada aún por el Covid-19 y la pérdida de miles de empleos y cierres de empresas, el gobierno federal ahora pretende buscar recursos para mantener sus programas, cuando lo que debe hacer es suspender sus grandes proyectos para muchos superfluos como la construcción del Tren Maya y la Refinería, porque hoy lo que interesa más es dar respuesta a los problemas de salud.
INEGI debe seguir realizando su trabajo estadístico y el SAT asumir su papel para lo que fue creado y esto, muchos lo consideran un exceso del gobierno federal. Campos Jiménez, se refiere a los cambios legislativos que propone Morena, a fin de darle facultad constitucional al INEGI para revisar el patrimonio inmobiliario y financiero de cada ciudadano de la República Mexicana, con el objetivo de medir la concentración de la riqueza.
Dijo que pareciera que sólo quieren recursos para impulsar sus proyectos muy cuestionados por su viabilidad técnica y financiera como el Tren Maya y la Refinería de las 2 Bocas: "y aun cuando resultasen benignos, romperían con el punto de equilibrio entre el apoyo social y la infraestructura".
Hay muchas empresas que buscan eficientizar su recaudación y son ellas las deben tener el apoyo del SAT y en este sentido, el presidente de la República no debe usar como instrumento político a Morena para lograr sus objetivos.
Cierto es que se avizora una escasez de recursos, pero se deben buscar otra fuentes alternativas de financiamiento para buscar atajar la crisis hospitalaria que también se avecina y no investigando cuánto tiene cada ciudadano.
"Y si de medir la brecha financiera se trata, entre cada quien, pues que cuestionen a quien tiene 5 autos en su cochera y no a quien con sacrificios apenas tiene un refrigerador y una pantalla".
Dice Ramírez Cuéllar, que el INEGI también podría tener acceso al SAT: "y sería correcto, siempre y cuando se fueran sobre las empresas evasoras que deben miles de millones de impuestos y no sobre quien apenas tiene para comer y esto, en caso de aprobarse, sería un fatal error, dijo.