El contador Enrique Saavedra Urbina, dijo que la nueva ley fiscal penal, que entrará en vigor y que tras ser publicada ya se analiza para asimilarla, debe establecer bien sus candados en sus reformas, adiciones, derogaciones y disposiciones del Código Fiscal de la Federación para no caer en terrorismo, es decir “que no paguen justos por pecadores”.
Hemos vivido administraciones federales, en donde la evasión fiscal era un secreto a voces para muchos y que grandes emporios y empresas evadía el pago de sus impuestos, incluso apoyados por presidentes de la nación y el hecho de que se hará justicia a quienes hemos pagado puntualmente, representa justicia y claro que se podría caer en extinción de dominio, porque para nadie es desconocido que han adquirido bienes inmuebles con dinero mal habido, dijo.
Este tipo de economía sumergida o economía informal, evita otros pagos o cotizaciones como el IMSS (Instituto Mexicano del Seguro Social) y obvio que las investigaciones que ha iniciado el gobierno federal a este tipo de contribuyentes por posibles irregularidades, es plausible.
Le recomendamos leer también:
“Creo que es positivo que este tipo delito fiscal se sancione con penas privativas de libertad, dejando atrás las infracciones administraciones o simples multas, pero insisto, se debe manejar con pinzas este tipo de acciones para no caer en el terrorismo fiscal, porque pueden pagarlas quienes no las deben, así que no debe haber equivocaciones y todo debe ser bien calculado”.
Qué bueno que llegó el tiempo de incentivar las denuncias sobre este tipo de evasión de impuestos, porque también es cierto de que muchas empresas recurren a este tipo de argucias para ocular sus bienes o ingresos de actividades tributarias, o bien, sobrevaloran los conceptos deducibles con el fin de pagar menos, añadió.
Es lógico que muchos buscan pagar una tributación reducida, “pero el tiempo de los paraísos fiscales ha pasado y es tiempo de que paguen los evasores, o conocidos también como los de dinero negro, es decir aquellos que han evadido sus gravámenes fiscales o bien que participan en actividades ilegales que evitan declaraciones para evadir impuestos”.
Es bueno que el gobierno federal revele la identidad de empresas que ocultan sus cuentas o se convierten en sociedades fantasmas y siendo así habrá piso parejo en cobros y obligaciones, subrayó.
