El padre Arturo Macías Pedroza, vocero de la Diócesis de Gómez Palacio, dio a conocer que algunas de las iglesias debido a que han sufrido robos también tienen que protegerse con sus dispositivos internos de video vigilancia.

En algunos de los recintos católicos se ha cometido le pecado de sacrilegio al robarse algunas de las imágenes religiosas, derivado de ello, por lo menos en la catedral de Nuestra Señora de Guadalupe se han instalado poco más de diez cámaras de video.

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Aunque el prelado reconoció que actualmente con la nueva administración municipal de Leticia Herrera Ale, se han disminuido significativamente estos delitos, en años anteriores se vieron en la necesidad de reforzar el sistema de videovigilancia.

En la Catedral de Nuestra Señor de Guadalupe de Gómez Palacio se pueden contabilizar por lo menos 14 cámaras en total, además, en la fachada principal se colocó una lona con la leyenda de que es un sitio monitoreado por la Dirección de Seguridad Pública Municipal.

“Aparte de robar que ya es pecado está el sacrilegio, que es el pecado contra las cosas sagradas y los pecados van aumentando de gravedad”, explicó le líder religioso.

Cuestionado sobre cómo han estado ellos trabajado para evitar los robos en los recintos católicos no les queda más que ellos mismos cuidarse entre los feligreses y quienes están al frente de las iglesias, ya que aunque la autoridad hace su parte en ocasiones no pueden hacer todo y evitar los robos.

“La pérdida del sentido de la religiosidad está llevando a perderle el respeto a todo lo que es sagrado, desde Dios, las cosas sagradas, las personas consagradas; ya cualquiera s ele pone a uno al brinco y, cualquiera se cree con autoridad para cuestionar la doctrina y eso, los robos son parte de esa actitud contra todo lo sagrado”.