De acuerdo a los productores nacionales de huevo y a las encuestas nacionales, México es el principal consumidor en el mundo, de ahí las variaciones que se dan en el precio cada tres meses.

El consumo anual per cápita es de casi 23 kilos, de ahí que los avicultores aprovechan la oferta y la demanda, lo que obliga no tener un precio fijo, de acuerdo a la calidad del producto, incluido en la canasta básica del mexicano.

En un expendio de pollo huevo, ubicado por la avenida Allende a un costado del mercado José Ramón Valdés, el precio de la cartera (con dos kilos) cuesta 51 pesos, aunque una semana atrás estuvo a 50 pesos.

Ahí se venden más de 100 kilos diarios de huevo, porque la encargada dijo, es lo que más consume el mexicano de la clase media, parte de la dieta diaria.

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El producto lo obtienen de San Juan de los Lagos, Jalisco, por ser más barato y porque el mercado local no tiene mucha cobertura.

El crecimiento de huevo que la demanda ha aumentado en un 45 por ciento a diferencia de hace 20 años en que se producían 1 millón 700 mil toneladas, pues hay que tomar en cuenta que este producto se consume por las mañanas y por las noches.

Para algunas amas de casa, 25.50 pesos por kilo es caro, tomando en cuenta que estuvo a 23 pesos, pues 2 pesos 50 centavos para la clase, desbalancea su economía.