Las brigadas comunitarias contra incendios forestales son contratadas durante cuatro meses y sus integrantes arriesgan la vida, convencidos de la importancia de proteger el bosque, porque sin esa zona arbolada, se acaban las comunidades de la parte de la Sierra de Arteaga y de otras zonas boscosas de la entidad, expresó Homero Gutiérrez Salazar.

Con varios años de experiencia en el combate de incendios forestales, forma parte de una de las brigada comunitaria que vigilan y combaten los incendios forestales y por ello lamentó la falta de consciencia de los paseantes, pues los recientes siniestros han sido provocados por el descuido humano.

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“Arriesgamos la vida y nos gusta, por conservar el bosque, lo que nos queda de flora y fauna, porque es el pulmón de esta zona de Coahuila. Si esto se nos acaba, ya no seríamos nadie.

“Nosotros siempre estamos activos para intervenir ante cualquier emergencia y como los campesinos están en las comunidades, son los primeros que llegan a tratar de contener la lumbre”, dijo.

Cada año los contratan durante cuatro meses, con una paga de 10 mil pesos mensuales. Sin embargo, la principal motivación de ellos es proteger el bosque y por eso arriesgan la vida, en cada ocasión que hay un incendio, pues suben a la montaña, para realizar diferentes maniobras para apagar la lumbre.

Incluso, en temporada fuera del contrato de los cuatro meses, también participan cuando surge alguna emergencia en la zona boscosa, “la gente nos reporta, porque ya nos conoce y siempre tenemos contacto con la Secretaría del Medio Ambiente”.

Por eso les pedimos a los visitantes y a los agricultores que se pongan el corazón en la mano, “que cuando no es temporada de hacer quemas, que lo respeten y nos ayuden a cuidar el bosque, porque ya nos queda poco y hay que cuidarlo”.