Es poco el avance logrado hasta el momento con la extracción del agua que inunda los tres pozos siniestrados en terrenos del ejido “El Mezquite”, de Agujita, municipio de Sabinas.

Lo anterior es de acuerdo a los reportes de los técnicos de Minera del Norte (MIMOSA) que actúan en las labores de rescate, quienes señalaron que desde ayer con el arranque del bombeo se logró reducir tan solo poco más de medio metro el espejo de agua, que se sitúa entre 24 y 30 metros de la superficie de los pozos.

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Mientras que el plan de acción determinado por los técnicos mineros en estas maniobras de rescate contempla realizar barrenos desde la superficie a una profundidad de 70 metros.

Estas acciones se iniciaron la mañana de este jueves con dos equipos de perforación, una vez que se logró determinar con mayor precisión la geografía subterránea de los pozos, a fin de realizar el achique en el ingreso del agua.

Mientras tanto se espera la llegada de equipos de bombeo de alta capacidad para reforzar los actualmente instalados.

Una vez controlada la fuente de agua permitiría bajar el nivel de la inundación y el ingreso de la cuadrilla de rescate de la unidad MIMOSA, que se encuentra alerta y en espera del avance del desagüe.

El plan de trabajo fue aprobado por el Gobernador Miguel Riquelme, quien recibió un informe pormenorizado de la situación al arribar al sitio a primeras horas de la mañana.

SE DESCONOCE EL NUMERO

En tanto, aún no se tiene precisión sobre si son diez o bien once los trabajadores quedaron atrapados en el pozo donde se inició la inundación.

Tampoco se conoce cuántos mineros se encontraban en los otros dos de este complejo de tres y que lograron salir antes de la subida del agua. Solo se conocen los cinco llegaron al IMSS para ser atendidos por las lesiones que registraron durante el escape.

La ausencia del contratista que operaba los pozos, Cristián Solís Arriaga, quien huyó del sitio luego del siniestro, ha dificultado los trabajos dado que se carece de toda documentación técnica de soporte y “ni siquiera hay un plano rudimentario del interior de la mina”, afirmó uno de los voluntarios que permanecen en el lugar.

Por declaraciones de personas involucradas, se comprobó que los pozos pertenecen a la empresa carbonera Infraestructura Minera CATAMCO, de la familia Zapata, proveedor de las Comisión Federal de Electricidad (CFE) y que subrogaba su operación a Cristián Solís.