Torreón, Coahuila. – Con más de 70 mil muertos a nivel nacional a causa de la pandemia del Covid-19 en la nación, y con más de 5 mil casos registrados en la ciudad de Torreón, llegó finalmente el mes número diez de año y con el, también una costumbre ya arraigada en La Laguna; las reliquias, sin embargo, ante la crisis económica que se ha registrado por el impacto del virus, en donde millones de mexicanos sufrieron recortes en sus ingresos en tanto que otros perdieron sus empleos, la pregunta que queda en el aire es ¿Habrá reliquias este 28 de octubre?
De acuerdo a información ofrecida por una persona que suele ofrecer a los laguneros este tradicional platillo compuesto por siete sopas y un deliciosa asado rojo, asegura que la inversión para realizar este pago por los favores recibidos durante el año, puede rondar los 10 mil pesos, dependiendo de cuanta se quiera repartir, por lo que en sus palabras sin duda si suele ser un gasto fuerte, pero si se tiene una suficiente planificación, ese dinero ya esta contemplado año con año.
Sin embargo, asegura que es cierto que esta pandemia ha afectado de fuerte manera a las familias laguneras, pues conocer a varias personas que son asiduas de hacer este tipo de platillos para agradecer a sus santos, que en estos momentos están pensando seriamente si llevarla a cabo o recurrir a tamales y a otros platillos.
Pero otras de las razones que también ponen en un hilo en esta ocasión a las reliquias, son las medidas preventivas del Covid-19, ya que suelen hacerse largas filas y acumulación de gente con sus recipientes, filas que fácil pueden acumular hasta 200 personas juntas en un espacio limitado, situación que iría en contra de las medidas sanitarias para prevenir brotes de Covid entre la ciudadanía.
De esta forma, algunas personas que acostumbran a repartir comida, se han puesto a pensar más allá del impacto económico, en el impacto del riesgo sanitario de aglomerar a varias personas en delimitado lugar exponiéndose a contagios masivos, por lo que están considerando la opción de solo hacerlas para cierto grupo de personas o igual repartir únicamente la comida entre vecinos, familia y amigos como medidas de prevención, ya que saben que de hacer el rosario y danza en la vía pública, suele acumular una gran cantidad de persona, que no acatarían señalamientos y se amontonarían por la comida.
Por último, esperan y confían en que autoridades sanitarias y Protección Civil logrean hacer protocolos y una lista de personas o lugares que suelen repartir la reliquia en estas fechas, para así poder tener un registro en que esos lugares se podrían aglomerar cientos de personas y a su vez establecer medidas para que la repartición pueda llevarse de buena manera, evitando contagios de esta enfermedad.