Luego de que la indigencia y la drogadicción también se debe a problemas emocionales en algunos sectores de la sociedad, a falta de un centro de salud mental, sueño anhelado de los gomezpalatinos por muchos años, la dirección de Salud Pública Municipal de Gómez Palacio, lleva a cabo pláticas de psicólogos en colonias y ejidos a manera de prevención y para evitar este tipo de daños.
"Es un problema serio que se incrementa sin embargo, es muy difícil contar con un programa específico de salud mental y por lo tanto metemos a nuestros psicólogos dentro de la población a dar pláticas a través de caravanas para atender cualquier situación de este tipo", dijo el doctor José Antonio Adame de León, director de esa oficina.
Por instrucciones de la señora presidenta municipal Leticia Herrera, estamos trabajando en este tipo de problemas emocionales en cada rincón de Gómez Palacio y detectando a quienes requieren de una ayuda urgente, añadió.
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"La indigencia y la drogadicción son temas que nos preocupan y por ello hemos insistido mucho para que en futuro Gómez Palacio cuente con un centro de salud mental. Yo se que la señora alcaldesa nos puede empujar para lograr ese sueño. Hay que recordar que el centro particular que dirigía Nicho (Dionisio Guerrero) se cerró tras su fallecimiento, pero mientras tanto, se continúa con la atención de un solo psiquiatra en el hospital general para atender a toda la población y esto es muy complicado por falta de especialistas".
Y aunque hay centros de salud mental privados, el costo de la consulta es muy caro, junto con el medicamento y el pago al médico, lo que difícilmente podría pagar quienes se encuentre entre los grupos vulnerables, además de que el tratamiento lleva varios meses, subrayó.
Insistió Adame de León, que en la Laguna hace falta un centro psiquiátrico de calidad y puede lograrse en futuro pese a que su costo sería millonario, pues recordó que muchos pacientes tienen que ir a Durango y por supuesto el viaje y estancia implica costos.
Comentó no tener un censo de cuantos indigentes y afectados por daños emocionales deambulen por las calles pero si tiene una visión de algunas colonias o comunidades muy alejadas donde existen este tipo de situaciones mentales adversas.
Tener un centro de este tipo no es tan sencillo pese a que se coordinen varias instituciones por construirlo, sin embargo, no está autorizado nada y mientras, seguiremos tocando puertas, concluyó.