Torreón, Coahuila. —Aunque aún en terapia intensiva, los constructores de todo México y en particular los de La Laguna, seguimos vivos, advierte el presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción Comarca Lagunera, Donato Gutiérrez Gutiérrez, luego de que se anunciara una nueva caída del diez por ciento para este 2024 al corte del mes de agosto.
“Es que, si hablamos de números, no solo podemos reflejar lo que ha ocurrido este año, pues todo el sexenio ha sido una caída que ha llevado a la industria de la construcción a ubicarse en una situación muy crítica, con cientos de cierres de empresas y miles de empleos perdidos”, destacó.
“Las políticas que aplicó el gobierno federal en materia de obra pública no fueron las más favorables, y esto se refleja en Coahuila a donde no se le asigno nada de presupuesto en los últimos años, en 2023 se tuvo un menos 25 por ciento en la producción de las empresas constructoras y hoy se ve un porcentaje similar para este año”, aseguró Donato Gutiérrez.
Al ser cuestionado de cómo salir del bache para los constructores de La Laguna y del país, el dirigente de la CMIC volvió a reiterar que es momento de aprovechar el nearshoring y las inversiones privadas que están llegando al estado de Coahuila, pues sin duda el sector privado se ha convertido en la principal ventana de los constructores para seguir adelante, recalco el dirigente.
En La Laguna se tienen establecidas unas 160 empresas constructoras, de las cuales un 90 por ciento están catalogadas como Pymes y el resto son consideradas de las cinco estrellas.
“Siempre hemos dicho que en La Laguna hay constructoras muy capaces, somos en cantidad y en calidad buenas, así que no hay porque traer empresas de fuera, pues aquí hay con que sacar adelante las obras más importantes”, expresó el presidente de la CMIC.