Torreón, Coahuila.- Mientras que en las colonias residenciales, populares y comunidades ejidales se aplican todos los protocolos sanitarios, inspecciones de verificación para que no se tengan reuniones con más de 20 personas, fiestas, albercadas, juegos de fútbol o hasta salir a correr en la mañana, tarde o noche, esto no aplica en las llamadas miniciudades o ciudades archipielago, pues en los fraccionamientos cerrados o privados que cuentan con su propia área común, ellos viven su propia contingencia sin ser vigilados, ni sancionados por nadie, pues al interior pasa de todo, pero nadie se da cuenta al estar detrás de una muralla y una caseta de seguridad que sólo pasan quienes viven ahí o quienes son invitados.
Sin que exista un dato preciso de cuantos fraccionamientos cerrados existen en la actualidad en Torreón, el titular de urbanismo y ordenamiento territorial, Aldo Villarreal, advierte que estos fueron concebidos bajo el tema de seguridad, con casetas de vigilancia o portones automáticos que son los que permiten en forma controlada los accesos a los llamadas cerradas.
Los casos de los fraccionamientos como Las Villas, Trojes, Senderos, Ampliación Senderos, Almendros, Los Portones, Villas San Ángel, San Antonio, y una centena más, tienen el mismo propósito, brindar seguridad a sus moradores y tener sus propias reglas de operatividad y funcionamiento al interior.
La realidad es que en estos lugares cerrados y controlados por guardias de seguridad privada, la contingencia del Covid 19 se vivió de una manera muy distinta, pues ahí no se frenaron las convivencias ni las reuniones de jóvenes, ni las albercadas y mucho menos la presencia de grupos musicales o bandas, para ellos la sana distancia fue con el resto de la población, más no con sus invitados y ahí los riesgos de la propagación de contagios sin que se dieran cuenta y que hoy se reflejan ya en la estadística.
A estos lugares ninguna autoridad pudo accesar, ahí no hubo clausura ni sanciones del área de padrones de la Secretaría de Finanzas del Estado o de Inspección y Verificación Municipal, pues aunque usted no lo crea ni la propia policía accesa libremente a realizar rondines a menos de que suceda algo extraodinario.
En las áreas comunes de estos fraccionamientos cerrados existen importantes áreas verdes donde se desarrollan todo tipo de actividades, tienen alberca, cancha de fútbol y algunas los espacios necesarios para trotar o correr a la hora que lo dispongan, todo ello sabededores de que a estos sitios no llegarían a clausurarles y muchos menos a ponerles cinta amarilla a sus bancas o porterías.
Así de sencillo en más de 100, 200 o 300 cerradas que ocupan unas dos mil hectáreas la contingencia del Covid-19 se vivió de otra manera.
Miniciudades o ciudades archipielagos
A este respecto el director de urbanismo en Torreón, Aldo Villarreal, explicó que son las que hoy en el mundo se les conoce como "ciudades archipielago" que son un conjunto de islas conectadas por corredores urbanos que, luego estos resultan insuficientes para atender la gran movilidad que se tiene que llevar en los desplazamientos.
Porque uno de los efectos de tener estos fraccionamientos cerrados, miniciudades o ciudades archipielago es mantenerlos cerrados, como tener una barrera que hace las distancias mucho más largas, más complicadas y que producen tráficos.
La transformación
¿Qué transformación urbana sufre la ciudad? Históricamente en Torreón los fraccionamientos y colonias habitacionales se proyectaron y construyeron en vecindarios de trama abierta, como la Colonia Los Ángeles, Torreón Jardín, San Isidro, Campestre La Rosita, etcétera. Este modelo físico espacial provocó vecindarios que por sus construcciones y áreas ajardinadas abonaron a crear paisaje y convivencia social, es decir, contribuyeron a hacer ciudad y un hábitat amigable.
Cifras
De acuerdo a cifras del INEGI (Censo de Población y Vivienda), del 2010 al 2015 se incrementó en 19,171 (11%) el número de viviendas en la Ciudad de Torreón, predominando aquellas que se ubican en conglomerados cerrados.
Las superficies ocupadas por los diversos modelos de organización habitacional de Torreón, pueden clasificarse en:
Fraccionamientos cerrados: colonias que, previas a su construcción, fueron concebidas como fraccionamientos cerrados con control de seguridad, ya sea con caseta de vigilancia o portón automático. Su superficie ocupada es de 2,049.81 Has. que representan el 17% del total.
Colonias Cerradas: fueron concebidas como zonas residenciales con libre tránsito, pero por motivos de seguridad y vialidad, la mayoría de sus accesos fueron restringidos por elementos como: rejas, macetas o postes; dejando sólo uno o dos accesos. La superficie que ocupan es de 392.56 Has., representando el 3%.
Fraccionamientos semi cerrados: debido a su traza urbana en circuito, callejones, vialidades curveadas, permiten su acceso libre en limitadas vialidades. Este tipo de diseño urbano es altamente susceptible a convertirse en colonias cerradas, debido su facilidad por clausurar y/o controlar sus accesos. Ocupan 428.11 Has. equivalente al 3%.