Madres de desaparecidos pasan un 10 de Mayo más sin sus hijos e hijas

Hoy un día de júbilo se convierte en uno de petición de justicia

Juan Manuel Contreras | El Sol de La Laguna

  · miércoles 10 de mayo de 2023

Madres con hijos o hijas desaparecidas vivieron un 10 de Mayo sin festejos. / Foto: Juan Manuel Contreras | El Sol de La Laguna

Un 10 de mayo más sin ellos y sin ellas. Un año más de lucha y esperanza, pero no los dejaremos de buscar, no nos cansaremos porque los queremos y los amamos”, fue de nueva cuenta el grito de batalla de un grupo de madres que no pudieron festejar su día, como el resto de las mamás porque no han encontrado a sus seres queridos que desaparecieron y hasta la fecha no saben nada sobre ellos.

Estas madres, que solo de lejos ven como otras celebran con jubilo su día, junto a sus hijas e hijos, demandaron a las autoridades hacer un lado la indolencia, la impunidad y que atiendan su llamado de justicia para dar con sus hijos y sus hijas.

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El grupo de mujeres asistieron a un misa que se ofreció en su honor, así como de sus desaparecidos, en la Catedral de Saltillo, para dejar en manos de Dios su aflicciones y quebrantos por sus hijos e hijas desaparecidas, por lo cual para ellas el 10 de Mayo es otro día más, gris como se han convertido todos desde que desaparecieron a sus seres más queridos.

Todas, después de la misa se reunieron en el árbol de la Vida y la Esperanza, ubicado en la plaza de Armas de esta capital, donde están las fotografías de sus desaparecidos.

Pertenecen a las fundación Fuerzas Unidas por Nuestros Desparecidos en Coahuila, señalaron que salieron de nueva cuenta a las calles a manifestarse y a exigir verdad y justicia ante la impunidad que prevalece en México.

La misa la ofició el sacerdote José Ignacio Flores, quien señaló que lo que para muchos es día de júbilo, pero que hay que hacer una pausa porque se sabe que hay muchas madres con hijas o hijos desaparecidos.

“Hoy que debiera de ser un día de júbilo se convierte en uno de petición de justicia para muchas personas que pasan tiempos difíciles y que se quiere que su voz sea escuchada”, abundó.

Indicó que esa voz que se levanta por un ser amado no debe de apagarse, que no se calle y que estas suplicas se escuchen entre la sociedad para que se sume a ellas y así las madres no estén solas.