“Mi opinión sobre el cierre de los ductos sale sobrando. Estamos en medio del tema y la realidad es que hay que apoyar a la población. Espero que los consiguientes operativos, porque apoyamos al Presidente en el combate al huachicoleo, los hagan con mucha proyección y con una estrategia muy completa”
Si dentro de dos días no se normaliza el abasto de gasolina, fundamentalmente en la Región Sureste, la industria local comenzará a tener pérdidas, subrayó el gobernador Miguel Ángel Riquelme al mostrar su confianza de que todo se regularizará en las próximas horas.
Pero, también, el Mandatario no se mostró seguro de que los ductos de Pemex se comiencen a abrir y de no ser así, al respecto Petróleos Mexicanos no ha emitido un comunicado oficial, como tampoco lo hizo con el cierre de los mismos, el estado estaría en una situación difícil en cuanto al abasto de combustible.
De ser así y de tener una sensible baja en la recepción de gasolina en las empresas de distribución y se incrementará el número de distribuidoras cerradas, se tomaría la medida de racionalizar la venta, que pudiera ser por litros o por cierta cantidad de dinero.
Precisó que sería mentirle a la población si dice que ya estamos mejor, porque no se ha eliminado el desabasto de combustible en Coahuila, donde sólo en la zona Sureste están cerradas diariamente entre 38 y 40 gasolineras.
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Riquelme, mencionó que además Pemex no les ha respondido ninguna de las solicitudes que le plantearon, tanto el Gobierno de Coahuila como los expendedores, a fin de agilizar el abasto de la distribución del hidrocarburo a las empresas distribuidoras de la entidad, ni sobre el ofrecimiento de la vigilancia estatal al ducto que viene de Nuevo León al estado.
En entrevista, indicó que espera la normalización del abasto al anunciarse la apertura de algunos ductos, lo que es una esperanza de que en las próximas horas se acaba este problema de desabasto al llegar con mayor rapidez la gasolina a los distribuidores.
Recordó que si bien Pemex no les ha respondido a los planteamientos de apoyo que le presentaron, sí existe en el estado una mayor coordinación con la organización de gasolineras, a fin de prever la llegada de más combustible entre semana, en caso de que no se restablece con normalidad la operación de los ductos.
Además, mencionó que trata de ver directamente con Pemex la posibilidad de que se transporte el combustible por ferrocarril a la zona industrial de la Región Sureste en tanto se normaliza el abasto.
Externó que también la colaboración con las autoridades municipales de Saltillo y de otros ayuntamientos ha permitido evitar conflictos en la venta de combustible, derivados de la desesperación por las largas filas y horas de espera para surtirse, lo que genera entre la población inquietudes y conflictos. “Afortunadamente se han podido evitar riñas por este problema”.
Asimismo, el Gobernador pidió ser responsables al hablar de los empresarios de Saltillo distribuidores de gasolina, en el caso de qué si vendían o no combustible robado, porque “yo siempre he tratado con ellos y es gente que ha estado toda su vida en esta ciudad y todos los conocen, por lo que dudo que alguna vez hayan hecho una compra indebida”.