La tarde del pasado domingo, en medio de un retén en la carretera Saltillo-Zacatecas, elementos de la Secretaría de Defensa Personal (Sedena) y Guardia Nacional aseguraron a más de 50 migrantes que viajaban en dos autobuses de la compañía de transporte Futura.
Según los detalles, las autoridades cumplían con el protocolo de revisión cerca del Ejido Tanque de Emergencia, cuando notaron que ambos camiones estaban llenos de personas ilegales.
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Parte de los pasajeros provenían de Centroamérica y Suramérica, además de que carecían de documentos que validaran su permanencia en Coahuila y el resto de México.
Como resultado, trabajadores y choferes de la línea de camiones fueron llevados hasta la Fiscalía General del Estado donde se abrió una carpeta de investigación para descubrir quién se encuentra detrás de los actos mencionados.
Por otro lado, el grupo de migrantes conformado por adultos y algunos menores de edad, quedaron en manos del Instituto Nacional de Migración (INM), el cual se encargará de cumplir con ponerlos de vuelta en sus respectivos países.