Con una población de dos mil 500 habitantes y solo cinco familias afectadas de manera directa, el ejido Santo Niño Aguanaval ha sido declarado una zona especial de contingencia debido al desbordamiento del arroyo. Este desbordamiento se produjo por la cantidad de agua de lluvia que descendió desde las partes altas del cerro. Se han emitido instrucciones precisas para resguardar a esas personas con familiares dentro de la misma comunidad de manera provisional y para implementar un plan de ayuda para otras 16 familias también afectadas, confirmó el alcalde Miguel Ángel Ramírez López.
"He dado instrucciones a todas las dependencias del gobierno municipal para que se constituyan en sesión permanente de este plan de contingencia y atiendan a todas las familias directamente afectadas por las avenidas de agua provenientes de las lluvias que bajan desde la sierra", explicó Ramírez López.
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“Se trata de un arroyo natural que desciende desde el cerro. Debido a la cantidad de agua de las lluvias, buscó su cauce original y afectó a las familias que ya estaban prácticamente sobre él”, indicó.
Se ha designado al Secretario del Ayuntamiento, Mario Alonso, y al Tesorero Municipal, Eduardo Efraín Agüero Huitrón, para que encabecen este plan de contingencia. En él estarán involucradas dependencias como SIMAS, Obras Públicas, Protección Civil y Bomberos.
Existe una corriente o canal de bajada más allá del cerro que impacta directamente a la comunidad. Por la carretera a Filipinas, hacia Santo Niño, hay un vado que se convierte en un arroyo natural y causa problemas cada vez que llueve, señaló el alcalde.
“Vamos a poner todos los recursos necesarios para apoyar a estas familias y, por lo pronto, para mantenerlas a salvo de cualquier otra situación, ya que el pronóstico indica que las lluvias continuarán todo el fin de semana”, recalcó.
