De llevarse a cabo como lo mandata la reforma judicial, tan solo en Coahuila la elección de jueces y magistrados requeriría de una cantidad de mil millones de pesos, mientras que para hacerlo a nivel nacional el INE necesitaría alrededor de 18 mil millones de pesos.
Esta cantidades duplicarían los presupuesto de los Institutos Electorales de Coahuila (IEC) y Nacional (INE) aplicados en las elecciones de junio pasado, donde en el estado se aplicaron 595 millones de pesos y a nivel país fueron 9 mil millones de pesos.
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Los recursos usados en Coahuila fueron tan solo para la renovación de las 38 alcaldías del estado, mientras que los aplicados a nivel nacional fueron para la Presidencia de la República, Diputados Federales y Senadores.
Las anteriores estimaciones fueron hechas por Rodrigo Paredes Lozano, presidente del IEC, quien a la vez externó que para determinar el impacto económico exacto, se necesitan las leyes secundarias y los reglamentos específicos de esta reforma.
Sin embargo, mencionó que durante este año el Instituto Nacional Electoral (INE) tuvo un ejercicio de cerca de 9 mil millones de pesos y es probable que solicite 18 mil millones para la organización de la primera elección de este tipo.
“Se trata de un análisis muy superficial y aventurado porque todo depende de las reglas que se establecerán en la nueva legislación”, abundó.
Asimismo, habló de la necesidad de determinar si la participación del IEC en este tipo de elecciones será en el 2025 o hasta 2027. “Haciendo un análisis muy superficial, tendríamos que estar arrancando a más tardar el 1 de enero del 2025.
Para ello, se requieren definiciones previas, ya que debemos trabajar en la integración de los comités, la convocatoria y el arrendamiento de los inmuebles necesarios para la instalación de los comités municipales, distritales o de la naturaleza que se establezca para estos fines”, explicó.
Paredes Lozano, indicó que la organización del proceso en Coahuila dependerá de las determinaciones del INE en otras entidades del país.
De igual forma, apuntó que para estos procesos existe la posibilidad de implementar nuevos mecanismos de votación, como urnas electrónicas o la ampliación del número de días para el desarrollo de la elección.
“Tenemos un lienzo en blanco en la organización de un proceso novedoso, donde podremos empezar a implementar modelos de votación diferentes”, expuso.