Piedras Negras, Coahuila. - Miguel Ángel Riquelme Solís, gobernador de Coahuila, informó que los más de 1,600 migrantes recluidos en un albergue, fueron regularizados, unos repatriados otros lograron su visa humanitaria, fue un trato digno y de mucha coordinación, estaban infiltrados agitadores que, por intereses personales, provocaban a la autoridad, pero no lo lograron su objetivo, finalmente todo está en orden, aseguró el ejecutivo estatal.

Resaltó el apoyo del Ejército Mexicano, la Policía Federal y del alcalde Claudio Bres, en coordinación con el gobierno del estado.

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Agregó que la entrega de visas humanitarias se va a dar, y con ello se podrá definir la situación de los migrantes.

“A quienes tienen derecho de ser entrevistados por la parte migratoria de Estados Unidos, se les dará el seguimiento y cauce correcto, se ofrecerá trabajo en la frontera y en otros puntos del estado a quienes quieran quedarse en México, y quienes no calificaron para obtener la visa humanitaria de Estados Unidos ni de México y no pueden justificar su estancia en el país, serán deportados de inmediato”.