El pasado 13 de abril se celebró el Día Internacional del Beso, y en La Laguna hay una historia de amor en un lugar conocido como "Callejón del Beso", que no es el mismo que el de Guanajuato, sino el de Torreón.
Este callejón se encuentra en la colonia Miguel Hidalgo, a los pies del Cerro de la Cruz, y es muy popular entre los habitantes del poniente de la ciudad, pese a tratarse de un pasadizo muy estrecho que no mide más de un metro de ancho.
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Está ubicado frente a las vías del tren y conecta el bulevar Revolución con la avenida Viento Libre. Una de sus características más destacadas son dos casas cuyas ventanas casi se conectan cuando se abren. Debido a su estrechez y falta de iluminación, el callejón es un lugar popular para los enamorados que buscan intimidad.
Sin embargo, el Callejón del Beso también está relacionado con una leyenda que se ha transmitido de generación en generación.
La leyenda detrás del Callejón del Beso en Torreón
Cuenta la leyenda que hace más de 60 años, en los inicios de la colonia Miguel Hidalgo de Torreón, una joven que vivía cerca del Callejón Tercero comenzó una relación con un ferrocarrilero. Cada noche, al escuchar el sonido del tren cerca del Puente Negro, ella subía corriendo el callejón para ver a su enamorado y recibir flores, regalos o cartas que él le lanzaba desde la máquina en marcha, mientras ella le enviaba besos a la distancia.
Sin embargo, cuando la mujer descubrió que su amante estaba casado y que había engañado con ella, decidió vestirse con su traje de novia y subir por última vez el callejón para lanzarle un beso final antes de lanzarse a las vías y morir.
Desde entonces, los habitantes de la zona dicen que se puede ver a la mujer de blanco subiendo por el callejón en las noches, pero en lugar de regresar al punto de partida, ahora camina hacia un farol ubicado en la avenida Viento Libre. Luego, vuelve al Callejón Cuarto para desaparecer frente a la máquina del tren.
Algunas personas aseguran haber visto a la mujer flotando con un foco en las manos y su vestido blanco ondeando como si hubiera viento. Incluso hay quienes afirman que la mujer les ha seguido hasta su casa después de haberla visto.
Mauro Ruiz Castellanos, un habitante de la zona, contó que la mujer lo siguió una vez cuando regresaba en la madrugada y que la vio flotando en la esquina. A pesar de que su hermana y su madre también la vieron, lograron entrar a su casa y cerrar la puerta para escapar del fantasma.
La leyenda de la mujer de blanco continúa en la actualidad y muchos habitantes de la zona temen caminar por el Callejón del Beso en las noches.