En relación con los servicios que se prestaban en un centro de rehabilitación de personas con adicciones ubicado en la colonia Rincón La Merced, de donde el pasado domingo se habrían fugado cerca de 15 jovencitas y el cual fue luego clausurado por inspectores municipales, se ha abierto ya una carpeta de investigación a fin de actuar como corresponda en caso de que se lleguen a encontrar elementos relacionados con la probable comisión de hechos ilícitos.
Lo confirmó así el titular de la Fiscalía General del Estado (FGE), Gerardo Márquez Guevara, quien indicó que al haberse hecho público este caso, independientemente de que en torno al mismo se formalicen o no denuncias penales, el Ministerio Público tiene la facultad de intervenir de oficio, como ya lo ha hecho al emprender las investigaciones pertinentes.
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Sobre lo que se ha reportado acerca de lo que sucedía en el anexo, comentó que se tiene conocimiento de que varias jovencitas se sustrajeron de la atención y del trato que ahí recibían, al retirarse por su propia voluntad.
El Fiscal no abundó en relación con los señalamientos que han hecho públicos familiares de internas del anexo en el sentido de que hay quienes decidieron escapar porque eran sometidas a malos tratos y hasta de abusos.
Indicó que actualmente la FGE trabaja en un programa que tiene como objetivo la revisión de las clínicas y centros de rehabilitación de adicciones identificadas como anexos, que por principio deben contar con una serie de requisitos legales para poder mantenerse funcionamiento.
Hizo notar que si bien es importante actuar para que este tipo de centros funcionen en orden y dentro de la legalidad, hay que recordar que son un auxilio muy importante para el tema de las prevenciones.
En tanto, Raúl Rodríguez García, director de Inspección y Verificación Municipal, informó que la clausura del centro de rehabilitación femenil ocurrió debido a que operaba de manera clandestina, bajo condiciones insalubres y sin cumplir con las medidas de seguridad que marca la normatividad.
Detalló que el lugar no cumplía con la NOM 016-SSA3 2012 y NOM 028-SSA2 2009, para el tratamiento y control de las adicciones, además de que no contaba con licencia de funcionamiento, ni tarjetas de salud.
Se dijo que entre los puntos observados, se encontró que carecían de consultorio médico para la atención de las usuarias, psicólogo, expedientes de las internas y por lo tanto no se llevaba un control interno, además de que se aplicaban métodos violentos en los procesos de rehabilitación de las internas.