Tras el paro de servicios de transporte realizado el pasado 23 de diciembre, no serán 22 sino 120 las concesiones de autobuses de rutas urbanas que habrán de cancelarse en Torreón por mantenerse inactivas o por presentar otras irregularidades, esto dentro de un proceso ya en marcha que deberá concluirá tentativamente en un plazo de 15 días.
La suspensión laboral que realizaron entonces un grupo de choferes a manera de protesta para demandar a sus empleadores que les cumplieran con el pago de su aguinaldo, fue lo que terminó por detonar la actuación decidida de la autoridad para poner fin de una vez por todas a las irregularidades que durante años han prevalecido en el transporte urbano.
De lo que se trata ahora es de concretar un proceso de depuración con el que se invalidarán legalmente aquellas concesiones que en los hechos llevan mucho tiempo inactivas, sin ser explotadas, mientras que hay otras que no pueden seguir respaldando la operación de autobuses cuyos modelos por su antigüedad dejaron de estar autorizados para el servicio público, de acuerdo con la reglamentación vigente.
Al respecto, el director de Transporte Público Municipal, Rodrigo Muñoz Montejano, confirmó que dentro del proceso que está en marcha a partir de hechos y circunstancias que han quedad debidamente asentados en actas notariadas, esta semana se terminó de enviar sus respectivas notificaciones a la gran mayoría de los concesionarios que están destinados a perder sus títulos, y los que aún no reciben el documento habrán de contar con él en el transcurso de los días siguientes.
Una vez que se les notifica, explicó, los concesionarios involucrados tienen 15 días hábiles para dar contestación, ofrecer pruebas y alegatos, si es que están en posibilidades de demostrar que ellos sí están explotando el servicio, o justificar el motivo de la interrupción del servicio que realizaron.
En cualquiera de los dos supuestos, si no aportan pruebas a su favor o no justifican sus interrupciones de sus operaciones, nada impedirá que en lo individual se establezcan dictámenes legales correspondientes precisamente a la cancelación de concesiones, dijo el funcionario.
Recordó que entre los transportistas que están involucrados en este proceso están algunos de las rutas Triángulo Rojo, Triángulo Amarillo, Independencia-Narro, Independencia-Magdalenas, Allende-Abastos-La Cortina y Laureles, donde se registraron las interrupciones del servicio a partir del 23 de diciembre y que se extendieron hasta el 4 de enero.
Están también contemplados concesionarios de las rutas Alianza-La Cortina, La Joya, Valle Oriente y Cereso Rojo, aunque estas tras el paro reanudaron sus operaciones casi de inmediato.
Muñoz Montejano recordó que en las rutas donde el paro se prolongó, el Municipio tuvo que encargarse de brindar el servicio al procurar para ello el respaldo de propietarios de autobuses de otras líneas e incluso de taxistas que accedieron a colaborar para atender las necesidades de movilidad del público usuario afectado.
Finalmente, comentó que, si bien hay en la actualidad 584 concesiones de transporte urbano vigentes en Torreón, en los hechos apenas están en operación unas 340, de manera que la cancelación no implicaría en lo inmediato afectaciones en el servicio.
Además, aclaró que la intención es reasignar posteriormente las concesiones que sean canceladas, a partir de un proceso de licitación, con lo que se le apostará a fortalecer el servicio.
