Si bien las autoridades se mantienen en alerta permanente debido a que no se ha descartado que las lluvias continúen en lo inmediato, luego de seis días de trabajo intensivo se logró dejar bajo control la situación de emergencia que se vivió ante severos problemas de inundación en la colonia Santiago Ramírez, identificada como la zona de mayor riesgo en relación con el mal temporal que ha prevalecido.
La información al respecto la compartió la Secretaria del Ayuntamiento de Torreón, Natalia Guadalupe Fernández Martínez, al hablar de que afortunadamente para este viernes ya había bajado ya de manera drástica el nivel del agua que llegó a alcanzar el interior de decenas de viviendas ubicadas en la parte más baja de la colonia, en tanto que se pudo reducir a un 70 por ciento de su capacidad el volumen de almacenamiento de la laguna de regulación de aguas pluviales ubicada en el sector.
- Te sugerimos: La Laguna de Regulación resiste, pero se llena otra vez
Recordó que eso es el resultado de una constante labor de desagüe con bombas adicionales a las que forman parte del equipamiento de la laguna y con numerosas pipas que han estado operando en distintos turnos, al tiempo que el trabajo de apoyo a los habitantes del sector ha sido permanente con la participación de dependencias de los distintos órdenes de gobierno a partir de que se emitió la correspondiente declaratoria de emergencia y se activaron los Planes Plan DN-III y el Plan GN-A.
Indicó que luego de que en medio de la emergencia no se ha dejado de brindar a los habitantes de la Santiago Ramírez distintos apoyos materiales, sin faltar entre estos paquetes de despensa, alimentos preparados y artículos de higiene, se ha estado levantando un censo en el que se han identificado alrededor de 100 familias que en calidad de damnificadas recibirán además para que puedan recuperar al menos parte de los muebles y enceres domésticos de primera necesidad que perdieron al haber sido alcanzados por el agua.
Hizo notar que para este viernes la inundación prácticamente había desaparecido, por lo que aunque quedan aún algunas zonas con encharcamientos en la vía pública, comenzaron a intensificarse los trabajos de desazolve de la red de drenaje y de limpieza tanto en las calles como en el interior de las viviendas que resultaron más afectadas, con lo que además se está terminando de dimensionar el nivel de daños que el agua ocasionó en los bienes materiales de los habitantes de la zona a fin de ofrecer el respaldo necesario.
Fernández Martínez comentó que si bien la prioridad de las autoridades ha sido precisamente la llamada zona de mayor riesgo, no se ha descuidado la atención que se ha demandado en otros sectores de la ciudad en los que se han presentado encharcamientos importantes, entre estos las colonias Nueva California, Las Torres, Villas Universidad y Loma Real.
