omo uno de los temas centrales que se abordaron durante las reuniones de trabajo que autoridades municipales de la zona metropolitana lagunera sostuvieron recientemente con los cónsules generales de Estados Unidos y Canadá, Roger C. Rigaud y Sandra Shaddick, así como con representantes del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), el alcalde Román Alberto Cepeda González se refirió a la importancia de generar cada vez más en esta región oportunidades de trabajo y desarrollo para quienes por necesidad y debido a distintas formas de agravio se ven obligados a abandonar sus países de origen.
Dijo tener claro que se trata de gente que de manera eventual puede llegar a buscar integrarse a la fuerza laboral, y no precisamente para competir con la mano de obra local sino para sumarse a la economía de Torreón y La Laguna, al tiempo que generan para sus familias una nueva esperanza de vida.
Luego de que el año pasado tuvo a bien formalizar un acuerdo de colaboración en este tema con ACNUR, no pudo precisar de momento cuántos refugiados se han beneficiado hasta ahora, pero aseguró que ya se está practicando este programa con excelentes resultados, gracias a que hay empresas que no han dudado en contratarlos para integrarse a una dinámica en la que ellos mismos son quienes hablan por sus resultados.
“Ellos dejan en su labor diaria el agradecimiento, y lo manifiestan con resultados, con competitividad y con productividad, y esto al final para las empresas es un ganar-ganar”, agregó Cepeda González.
Mencionó también que afortunadamente en la región se han estado generando bastantes fuentes de empleo, por lo que no se dificulta ayudar a los refugiados a construir una nueva esperanza de vida, lo que representa para Torreón y para las empresas ganar a una gente con un agradecimiento.
Por otra parte, Cepeda González, hizo notar que la reciente visita de los cónsules norteamericanos con sede en el vecino estado de Nuevo León y de los enviados de ACNUR, se da dentro del contexto de una región segura y altamente competitiva, a la que en los últimos años no han dejado de llegar inversiones que se traducen en empleo y desarrollo.
Estimó que la presencia de este tipo de visitantes es un reconocimiento tácito de los importantes avances en seguridad y en desarrollo económico, en una región que por tanto es propicia para este tipo de proyectos de carácter internacional que tienen que ver con derechos humanos y con garantías individuales.