Torreón, Coahuila.- Las buenas acciones siempre se repiten, una historia que ha sido ejemplo para muchos y que gracias a la valentía, nobleza y gran espíritu de solidaridad de Iveth Camila Ortiz Ramírez se ha llegado a conocer hasta el continente europeo; la vacunación antiCovid-19 para el ejido Albia se volvió a repetir.

Este jueves Camila se levantó desde muy temprano para brindar una entrevista a una televisora local, pasadas las ocho de la mañana ella, sus tres hermanas pequeñas y su mamá desayunaron en casa para esperar la hora de partir al ejido Albia, donde tenían la cita con los adultos mayores que la buscaron para poder recibir la vacuna.

Su mamá, Brenda Ramírez, es su principal apoyo y también la protagonista de estas acciones; una de las enfermeras en el centro de vacunación expresó que “es gracias a lo aprendido en casa que ‘Cami’ está realizando cosas increíbles”.

A las 9:20 de la mañana, Camila y Brenda salieron de su casa y tomaron camino hacia el ejido Albia, que se encuentra cerca del Hormiguero. Al llegar, ya los esperaban los adultos mayores de 60 años que la pequeña ayudó a registrarse por segunda ocasión, pero que ahora recibieron una ayuda que traspasó fronteras, pues Romero, desde España, les mandó dinero para poder rentar el transporte.

En las jardineras y bancas de la plaza principal del Ejido Albia, Camila y Brenda comenzaron a llenar los formatos de registro para la vacunación de los adultos, así como revisar que todos llevarán la documentación necesaria para que les autorizaran la aplicación.

Una camioneta tipo van llegó a las 10 de la mañana y todos ya estaban listos para abordar, mientras subían para tomar asiento, Cami les ponía gel antibacterial en sus manos y verificaba que absolutamente todos usaran cubrebocas. Estando todos adentro del transporte les dijo, “no tengan miedo, solo será un piquetito”, esto refiriéndose a la vacunación.

Durante el camino al centro de vacunación instalado en el Coliseo Centenario, El Sol de La Laguna tuvo la oportunidad de platicar con cada uno de los 15 adultos mayores que se encontraban en el transporte, quienes con una mirada de esperanza se manifestaban felices y muy agradecidos con Camila.

Andrea, Ofelia, María Guadalupe, María Juliana, Pascual, David, Arturo, Amalia, Jesús, María de la Luz, José Luis… estos son algunos de los nombres de quienes recibieron hoy la vacuna contra Covid-19, todos le dieron las gracias a Camila: “me sorprende que apeas tiene 12 años y vea todo lo que está haciendo, ojalá que Dios le de mucha sabiduría para que siga ayudando”, expresó Amalia, quien conoce a su familia desde hace bastantes años.

Ella es pequeña pero sus ideas y acciones son tan grandes que se ha ganado la admiración de toda la comunidad de todo el Ejido Albia y la Comarca Lagunera; ingresando al módulo de vacunación Camila se encargó de tener a dos enfermeros quienes fueron exclusivos para aplicarles la vacuna a los adultos mayores de Albia.

Ninguno tuvo molestias o dolor por el pequeño piquete de la aguja con la vacuna,:“ya nos sentimos más protegidos, pero no bajaremos la guardia. Hay que tomar las precauciones indicadas y no salir si no es necesario”, recalcó Albia.

Mientras transcurría el tiempo de observación uno de los adultos mayores, pregunto si podía tomar alcohol, lo cual provocó un momento de risas arriba del camioncito; pero uno de los enfermeros les dijo que eso podían hacerlo hasta después de una semana pasada la aplicación, además si estaban en tratamiento por alguna enfermedad cronicodegenerativa podían seguir tomándola sin ningún problema.

En caso de que sintieran dolor les dijo que no se tocaran, sobaran o rascaran; además el único medicamento que pueden tomar es el paracetamol.

Alrededor de las 11 de la mañana todos ya iban de regreso a sus hogares, Camila manifestó que esta acción la hace de todo corazón y su principal consejo para todos los niños y jóvenes fue cuidar a sus abuelos, pues un día están y al otro, no se sabe.