Torreón, Coahuila.- Sin duda alguna la pobreza extrema sigue causando estragos en cientos de familias que llegaron hasta esos lugares por medio de la invasión y que a 22, 15 y 13 años no han alcanzado a despertar el interés de parte de las autoridades gubernamentales para ser considerados como merecedores de un pie de casa, la construcción de un cuarto o bien cuando menos un baño. Son unas 650 familias las que viven en condiciones muy críticas y que solo piden les tiendan la mano.
Tal es el caso de los vecinos de la colonia Benito Juárez, antes conocida como Eduardo Olmos, que llegaron hace trece años a invadir estos predios ubicados a espaldas del Fraccionamiento Santa Sofía a unos metros del ejido La Perla y quienes en su momento fueron liderados por Cuca Orona.
A 13 años no han logrado que las autoridades del gobierno federal, vía la SEDATU, les incluya en los programas de vivienda, pues si bien es cierto aparecen en las estadísticas del Coneval y del INEGI, nadie les ayuda a resolver su problema, llamado pobreza extrema.
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Doña Martina recuerda cuando llegaron a esos terrenos y con hules, cartón y maderas armaron sus jacales para meterse con sus hijos y nietos, era la oportunidad de hacerse de una casa, de un terreno que hasta entonces no tenían.
“Una vez vino un presidente y nos dijo que nos iban ayudar para vivir mejor, que nos iban hacer un cuartito y meterían pavimento, pero nunca llegó”, reiteró.
Se trata de 360 familias que llegaron a ese lugar con la intención de hacer su casa, pero la falta de trabajo y la manera de subsistir, en cientos de casos, se los ha impedido, por lo que siguen viviendo en lo que se conoce como “Cartolandia”.
Existen en Torreón otros puntos rojos donde también la pobreza aprieta, uno ubicado en el sector de la Buenos Aires, a un costado de la Camilo Torres y otro que aparece en la colonia J. Luz Torres.
Se estima que son unas 650 familias las que viven en extrema pobreza en Torreón, dato que no pudo ser cotejado con la gente de Desarrollo Social Estatal, pues su titular Shamir Fernández Hernández, se encontraba de vacaciones.
La falta de pavimento, un buen drenaje, el suministro de agua, un cuarto donde refugiarse de las inclemencias del tiempo, sin dejar de lado la pavimentación, son entre otras las muchas carencias que se observan en estos lugares, donde la energía eléctrica se logra con los famosos “colgados”.
Es una realidad que los programas federales no podrán llegar a estos lugares porque tienen un serio problema para ser considerados por el gobierno federal, que no viven en un predio regularizado y entonces la pobreza extrema en su caso continúa.
