Torreón, Coahuila.- En un proceso que contó con el aval y la supervisión de personal del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), se realizó el remozamiento general del centenario monumento a Benito Juárez, ubicado en la Plaza Mayor.
Con una inversión del orden de los 90 mil pesos, se llevaron a cabo los trabajos que tuvieron como objetivo devolver su aspecto original esta estructura en la que durante muchos años ha sido objeto de diversas pintas, así como de daños en actos de vandalismo, informó Luis Reyes Castrellón, titular del Centro Histórico, dependencia perteneciente a la Dirección General de Obras Públicas del Ayuntamiento de Torreón.
Comentó que parte del daño que presentaba el monumento que fue erigido en 1915, obedecía a que con el paso de los años, las condiciones del clima de la región hicieron que la cantera del podio presentara una marcada decoloración en sus tonos.
“Por esos motivos se realizó un aseo profundo de la estructura para su restauración, acatando las recomendaciones en los procesos, emitidas por el Instituto Nacional de Antropología e Historia”, agregó.
Carlos Castañón Cuadros, cronista y director del Archivo Municipal Eduardo Guerra, señala que el monumento está lleno de símbolos y guarda varios relatos. Refiere que el estético pedestal lo diseñó el arquitecto Abel Blas Cortinas, personaje que también proyectó el Teatro Isauro Martínez, y a la inauguración de la obra asistió el hijo del expresidente Juárez.
Para el aseo a profundidad se usó agua purificada, cepillo de ixtle, así como jabón neutro, además de un aparato para aplicar vapor a presión, con el objetivo de retirar varias pintas y hongos adheridos a la piedra. Para facilitar los futuros cuidados que el pedestal pudiera necesitar, se aplicó un sellador especial para cantera.
A decir de las autoridades citadas, el rescate del patrimonio cultural, material e histórico, es tarea de todos los habitantes de nuestra ciudad y no sería necesario invertir esas cantidades de dinero en daños provocados por los ciudadanos.