Convencido de que es fundamental promover para su realización obras y proyectos con una visión a futuro, el alcalde Román Alberto Cepeda González aseguró que Torreón habrá de contar con la nueva planta tratadora de aguas residuales que necesita y que debe sujetarse a las nuevas disposiciones técnicas y legales establecidas a nivel federal.
Luego de que se solicitó una prórroga para poder cumplir con dichas disposiciones a partir del año 2027, y cuestionado sobre con qué tanta prioridad se atenderá este asunto a partir del próximo año, dio por hecho que se tomarán medidas concretas al respecto. “Es un tema de obligatoriedad, por lo que sin duda tiene que hacerse”, dijo.
Comentó que los nuevos mecanismos de plantas potabilizadoras son fundamentales, y que en función de eso la autoridad municipal estará muy atenta de ver qué es lo que más le conviene a Torreón.
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Recordó que desde el inicio de su gestión se ha estado trabajando en dos grandes temas, orientados a lograr mejoras en los servicios de proveeduría de agua y drenaje, siempre con una visión a largo plazo, de cara al año 2040.
“No podemos quedarnos cortos porque al final ya vimos lo que pasó con una infraestructura hidráulica, en el caso del Sistema Municipal de Aguas y Saneamiento que nos tocó arreglar problemas históricos que tenían 20, 30, 40, 50, 60 años, y es importante que las siguientes administraciones no carguen con problemas históricos”, expuso.
En ese sentido, agregó que con el dinamismo de Torreón en el día a día, el crecimiento demográfico e industrial ya producen una demanda importante para la administración, como para todavía cargar con temas históricos.
El Alcalde recordó que en la actual administración se ha hecho un gran esfuerzo, así que “vamos a concluir con 30 nuevos pozos, y tenemos que darle duro a la renovación de tuberías en donde se siguen fugando alrededor de 600 a 700 litros por segundo entre fugas y tomas clandestina”.
También mencionó que se ha estado procurando que todos los espacios públicos de la ciudad se rieguen con agua tratada y no potable, y para eso es que se necesita una planta tratadora adecuada.
Cepeda González no descartó que además de una planta tratadora general que procese el mayor volumen de aguas residuales que se generan en Torreón, se tenga que promover la creación de otras u otras más en la zona norte de la ciudad, que mantiene un importante crecimiento urbano.
De hecho, reconoció que es posible que se proyecten pequeñas plantas para tres, cuatro o más fraccionamientos, o incluso para una sola colonia si sus dimensiones así lo exigen.
“Creo que si es importante ya visualizar mecanismos que tengan una solución a futuro, no a corto plazo, porque todo lo que se ve a corto plazo siempre será un problema para Torreón en el mediano plazo, y creo que es importante que Torreón crezca con una visión a futuro en todos los temas”, agregó.