Torreón, Coahuila. – En la casa de sus padres, en el ejido El Perú, familiares, amigos, vecinos y conocidos dieron el último adiós a Alejandro Arriaga Jaqués, trabajador que murió calcinado en una empresa de Torreón.
El incendió sucedió minutos antes de las 11:00 horas del miércoles, por la carretera Unión – La Partida, en la zona Norte de la ciudad, en donde el hoy occiso descargaba diésel en un camión.
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El cuerpo fue encontrado totalmente calcinado y sus restos llegaron alrededor de las 13:00 horas de este jueves, a dicho poblado, donde es velado.
Será sepultado en el panteón del ejido La Palma, a un costado de El Perú.
“No tenía 40 años, como dijeron las autoridades, tenía 53. Él era originario de aquí, de El Perú, aquí lo conocí y nos casamos hace dos años”, dijo su esposa, Norma Patricia Villa.
“Se fue de la casa al 20 para las 9 y se supone que vendría a comer después de la 1, pero no llegó. Me avisaron que había sufrido un accidente y a las 3 me informaron que había muerto”, comentó.
Alejandro trabajaba en la empresa Autotransportes Ugarte, junto con sus dos hermanos menores. Él era el segundo mayor de siete.
“Estaba arriba de un camión, descargando diésel, mi cuñado estaba abajo y me dijo que la explosión fue abajo, pero alcanzó a salir y mi esposo no, ardió”, describió.
“Era el mejor hombre del mundo, mi mayor apoyo. Yo tengo mis hijas y los quería como si fueran de él.
Destacó que era alegre, hogareño, cariñoso y entregado a su familia.
