Torreón, Coahuila.- Un importante avance a favor de la ciencia médica, que se plantea como la pauta a seguir en futuras investigaciones orientadas a la búsqueda de nuevas alternativas de tratamiento de diversos padecimientos, entre éstos el cáncer, el mal de Parkinson y el Alzhaimer, lo es el logro alcanzado por Andrés Hernández de la Peña, cuyo descubrimiento lo llevó a poder observar y mostrar imágenes tridimensionales de un proteosoma, como se conoce al complejo de proteínas existentes en las células.
Se trata de un destacado científico mexicano, un joven ingeniero en biomedicina que a base de estudio y gran dedicación ha logrado sobresalir en los Estados Unidos dentro del campo de las ciencias, donde su más reciente publicación en una revista especializada de importancia a nivel internacional es lo que lo ha colocado en el centro de atención de muchos alrededor del mundo.
Al encontrarse de visita en esta región, Hernández de la Peña recibió la invitación del Instituto de Ciencia y Medicina Genómica de Torreón que dirige el doctor Rafael Argüello Astorga, a fin de que compartiera sus experiencias y logros con jóvenes laguneros que se ven atraídos por el mundo de la investigación. A ellos básicamente les sugiere perseverar para ir detrás de sus objetivos, y en ese afán aprovechar cualquier tipo de oportunidades de asignación de becas que se les presenten para que, como él lo hizo con el apoyo del gobierno estadounidense, puedan formarse y superarse profesionalmente.
Graduado como doctor en filosofía de ingeniería biomédica y con un postdoctorado actualmente en proceso, Andrés, quien se mudó a los Estados Unidos desde la adolescencia, ha acumulado una serie de publicaciones con el resultado de sus investigaciones, entre éstas la que recientemente lo llevó a recibir un reconocimiento que en el campo de las ciencias tal vez equivale a una medalla olímpica de oro en el ámbito deportivo, según lo refiere el doctor Argüello.
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Al respecto, explica que su artículo divulgado en la revista Science es alusivo a los resultados de una investigación que lo llevó a descubrir la imagen tridimensional del proteosoma, que es un conjunto o complejo de proteínas muy importantes para las células, lo cual muchas personas por todo el mundo habían estado tratando de obtener, sin éxito.
“Esto nos permitió ver como en una película, cómo se mueven los distintos elementos de esta proteína, y entender absolutamente cómo funciona, y es una aportación que sirve para ampliar otras investigaciones, pues se trata de proteínas involucradas en muchos aspectos celulares, así que el resultado tiene muchas implicaciones clínicas y científicas, por lo que el interés que ha despertado es muy grande.