Torreón, Coahuila.- Hoy en día, la mujer tiene una destacada participación al interior de las Fuerzas Armadas, pasando muchos años para que pudieran obtener derechos de igualdad jurídica, social y política, facilitando mucho la destreza singular de ellas, su incorporación al estilo de vida militar.
Actualmente, más de 32 mil mujeres forman parte del Instituto Armado Mexicano, constituyéndose en un claro ejemplo, ante la sociedad, de la promoción de la igualdad de géneros.
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Para hablar del importante papel que desempeñan las mujeres en las Fuerzas Armadas, Leticia Gaeta Pérez, Subteniente Auxiliar Enfermera, perteneciente al Hospital Militar de Torreón, ubicado en el interior de la XI Región Militar, 6-B, “Gral. José Isabel Robles”, compartió algunos de los momentos importantes en la historia que les fueron abriendo camino:
El 21 de marzo de 1938, el Presidente Lázaro Cárdenas, fundó la Escuela Militar de Enfermeras del Ejército Mexicano (primer plantel militar al que podían ingresar mujeres), misma que en 1946, cambió su denominación como Escuela Militar de Enfermeras y Parteras, finalmente, en 1963, fue abanderada con el nombre de Escuela Militar de Enfermeras.
De esta forma, se consolidó la presencia de la mujer en el Ejército Mexicano, ingresando también a la Escuela Médico Militar en 1973 y en la Escuela Militar de Clases de Transmisiones en 1975, para capacitarse como radio-operadoras, a la Escuela Militar de Odontología desde 1976 (único plantel que desde su inicio se consideró mixto).
La mujer militar, actualmente escala peldaños en el medio castrense, desarrollando actividades de índole administrativa, logística y operativa en los organismos del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos.
Pueden ostentar jerarquías de generales, jefes, oficiales y tropa, y desempeñar un cargo conforme a su grado; tienen derecho a participar o concursar en las promociones con similitud de exámenes y todos los beneficios estipulados en las leyes y disposiciones reglamentarias.
Cabe destacar que la igualdad de oportunidades en la educación entre mujeres y hombres en las instituciones educativas militares, hace a las fuerzas armadas, más incluyentes, competitivas, solidarias y sin prejuicios, constituyéndose en ejemplo, ante la sociedad, de la promoción de la equidad de géneros.
Hasta el ciclo escolar 2006-2007, la apertura de admisión para el conjunto de mujeres a los planteles del Sistema Educativo Militar, era para la Escuela Militar de Enfermeras y en la modalidad de educación mixta, en la Escuela Médico Militar y la Escuela Militar de Odontología.
Como parte de las acciones emprendidas por la Secretaría de la Defensa Nacional, a partir del año 2007, las mujeres ingresaron, entre otros, en los siguientes establecimientos de educación militar: Escuela Superior de Guerra, Heroico Colegio Militar, Colegio del Aire en las Escuelas Militares de Aviación y Especialistas de la Fuerza Aérea, Escuela Militar de Ingenieros y en la Escuela Militar de Transmisiones y Clases de Transmisiones.
A partir del ciclo escolar 2017-2021, ingresan hombres a la Escuela Militar de Enfermeras, cambiando su denominación a Escuela Militar de Enfermería; asimismo, se apertura el ingreso de mujeres a la Escuela Militar de Oficiales de Sanidad, planteles a los que solo ingresaban mujeres y hombres, respectivamente, fortaleciendo la igualdad sustantiva en las Fuerzas Armadas.
En consecuencia, contamos con un Ejército y Fuerza Aérea en donde las mujeres se desempeñan, como enfermeras, odontólogas, médicas, licenciadas en derecho, psicólogas, contadoras, pilotos aviadores, intendentes, especialistas de la fuerza aérea en diferentes ramas de la ingeniería, oficinistas, afanadoras, etcétera y abriéndose la posibilidad de que incursionen en el Servicio Militar Nacional, como voluntarias dentro de los programas sociales que éste contempla.
“De las 32 mil 124 mujeres que forman parte de nuestro instituto armado, tenemos a guerreras que cumplen sus funciones de forma cabal y honrosamente, conjugándolas con sus labores de madre, hija y esposa, sin usarlo como pretexto por su condición, generándose el respeto entre hombres y mujeres. Cabe mencionar, que en un mundo históricamente de hombres, también hay cabida para la mujer, quien se ha convertido en parte sobresaliente e importante de la vida militar. Llegó para quedarse”, enfatizó la Subteniente Leticia.