“Lo cerrado de la competencia interna que se vivió el domingo al interior del Partido Acción Nacional (PAN), para la elección de un nuevo dirigente estatal, no puede ser visto como un indicio de divisionismo o debilidad, sino, por el contrario, se trata de una clara muestra de la democracia que siempre se ha impulsado y se vive al interior de este instituto político”, opinó Ignacio García Castillo, coordinador de la bancada panista del Cabildo de Torreón.

“Si fuera otro tipo de situación, todos iríamos a la cargada con alguien, y afuera a toda la ciudadanía habríamos entonces de darle la señal de que se vive una democracia simulada, pero no es así”, puntualiza el primer regidor.

Luego de que los resultados preliminares de los comicios en los que compitieron tres aspirantes a la dirigencia marcaban ya de manera preliminar una tendencia favorable a Mario Dávila, seguido con una cercana diferencia por Jesús de León, García Castillo, reconoce que “todo mundo pensaba que Chuy podía tener la mayoría, sin embargo no fue así, ya que en el estado se expresó el panismo, y hoy podremos estar confiados en que están cambiando las cosas en México y en Coahuila”.

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Agregó que debe tenerse siempre en claro que en la democracia auténtica a veces se gana y a otras se pierde, así que no queda más que respetar el resultado que finalmente se confirme.

Para terminar, el panista dijo que, al margen de quien quede al frente del comité directivo estatal del PAN, él en lo particular seguirá señalando que las alianzas en Coahuila no le convienen al partido, postura que procurará hacer valer en cada foro y espacio en el que se le brinde la posibilidad de participar.