Integrantes del Cabildo acordaron convocar a una mesa de trabajo con la intención de hacer una serie de propuestas orientadas a que dentro del proceso de definición del nuevo Reglamento de Urbanismo y Obras Públicas se estipulen sanciones específicas a aquellos particulares que realicen construcciones y en su caso instalen nuevos establecimientos sin antes haber cubierto los trámites en materia de licencias y solicitudes de cambios de uso de suelo, como también cuando se trate de multar a vecinos ruidosos.
El acuerdo lo establecieron los integrantes de la Comisión de Planeación, Urbanismo y Obras Públicas del Cabildo, luego de autorizar los cambios de uso de suelo de tres predios ubicados en las colonias Nueva Los Ángeles, Ampliación La Rosita y fraccionamiento Residencial del Nazas.
Según el acuerdo, de lo que se trata es convocar a una reunión al Comité Técnico de Reglamentación del Ayuntamiento, para que antes de que sean turnadas para su votación, dentro de las nuevas disposiciones del citado reglamento que ya se han socializado, se incluyan algunas precisiones que, se considera, hacen falta.
Al informar lo anterior, el presidente de la citada comisión, José Alberto Rosales Arcaute, comentó que lo que se busca evitar es que haya disposiciones reglamentarias que al final queden como leyes imperfectas o “sin dientes”, al establecer determinaciones y exigencias que deben cumplirse sin que se estipule la manera en la que han de ser sancionados quienes no las acaten.
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Se refirió a que es en cierta forma común que se realicen construcciones para la habilitación de negocios en predios no autorizados para ello en lo que a uso de suelo se refiere, y que de manera posterior se solicite la correspondiente solicitud, mientras que por otra parte ha sido frecuente que se llame la atención a vecinos ruidosos, como se identifica a quienes suelen escuchar música por encima del volumen máximo permitido sin que se les castigue por ello, esto debido a vacíos reglamentarios que se pretende cubrir.
DATO
Se pretende evitar que haya disposiciones reglamentarias “sin dientes”