Torreón, Coahuila. - Aun cuando consideró que carecen de sustento real las afirmaciones en el sentido de que la presencia de vendedores informales se ha incrementado en un 50 por ciento de la ciudad, lo cual en su opinión se ha advertido desde una percepción subjetiva, el titular del departamento municipal de Plazas y Mercados, Luis Alberto Mendoza Balderas aseguró que la postura de preocupación que sobre este asunto ha fijado la representación a nivel local de la Cámara Nacional de Comercio, es muy entendible y por tanto se le dará la atención debida.
El funcionario reconoció que ciertamente hay ahora más personas tratando de llevar el sustento a sus hogares al incursionar en distintas formas de comercio en las calles, sin embargo, no se cuenta con los parámetros para poder medir con certeza en términos porcentuales cual ha sido el crecimiento de ese tipo de actividades.
En tanto, agrega, la dependencia a su cargo trabaja ya con miras a poder depurar el padrón de vendedores autorizados, actualmente de alrededor de dos mil 300, mientras que las restricciones continúan para prevenir y en su caso anular situaciones de desorden en el uso de los espacios públicos y sobre todo para evitar que se generen conflictos de competencia desleal con el comercio formalmente establecido.
Según se entiende, un dato real sobre el crecimiento del que se habla podrá conocerse de una manera más aproximada a la realidad hasta que concluya la depuración y se avance en las acciones de regulación para que todos quienes están en la vía pública en el comercio informal tramiten permisos y se sujeten a las disposiciones reglamentarias vigentes.
“Desde luego que estamos ocupados en el tema de la regulación y de la restricción, y en que no se haga un comercio desordenado. No puede haber un comerciante que venda los mismos productos que un negocio cercano a un negocio formalmente establecido donde están pagando luz, agua y empleados, porque eso es competencia desleal”, expuso Mendoza Balderas al referir que sin dejar de atender las implicaciones sociales que hay en este asunto se debe procurar nivelar la situación entre el comercio formal y el informal.
Por otra parte mencionó que si bien han aparecido nuevos vendedores informales, también hay otros que ante una situación complicada han dejado de incursionar en el comercio al menos de manera provisional, en el entendido de que los que se mantienen activos son los mismos que siempre diversifican su oferta y se desplazan de un sector a otro de acuerdo con lo que más se demanda en cada temporada del año, en tanto que “hay un padrón vivo de a lo mejor mil 700 vendedores, que tienen un tarjetón pero además de eso estamos en un trabajo de revisión de padrones en un proceso de depuración”.
Respecto al trabajo permanente de regulación y control, se aseguró que el mismo es permanente, y como ejemplo de ello se mencionó que “en diciembre quitamos en una semana 90 vendedores del centro, nada más que tal vez no se notó porque había demasiados vendedores”.