Torreón, Coahuila.- Inspectores municipales clausuraron en el transcurso de la noche del viernes tres bares en cuyas instalaciones no se respetaba la sana distancia ni se atendían ninguna de las medidas adicionales que en la actualidad son obligatorias a favor de la prevención de riesgos sanitarios relacionados con el Covid-19, y además dispersaron varias reuniones en vía pública y en algunos domicilios particulares.

Lo anterior se dio como parte de los resultados de la participación que tiene el personal de la Dirección de Inspección y Verificación Municipal del Ayuntamiento de Torreón dentro del operativo “Cero Tolerancia”.

El titular de la dependencia, Antonio López González, dio a conocer que dos de los establecimientos clausurados son el restaurante-bar “Calavera” ubicado en calle Galeana 76 norte el centro de la ciudad, en donde se constató la presencia de aglomeraciones de personas en un ambiente relajado en el que nadie cumplía con el uso de gel antibacterial y cubrebocas, sin que nadie se ocupara de poner orden al respecto.

Otro es el caso del restaurante-bar “El 32” de Múzquiz y Matamoros del primer cuadro de Torreón y V-18 de avenida Victoria y calle 18, donde además de no atender las medidas sanitarias, los clientes que ahí se encontraban consumían solamente bebidas alcohólicas y nada de alimentos.

En los tres casos, los propietarios de los establecimientos, para reabrirles deberán pagar multas de entre los ocho y los nueve mil pesos, además de comprometerse a o reincidir en las infracciones en que incurrieron, de lo contrario podrían llegar enfrentar sanciones más severas y eventualmente una clausura definitiva.

López González informó que también como parte del operativo, la tarde del sábado fue necesario dispersar una danza que acompañaba la ofrenda de una “reliquia” en honor a la Virgen de Guadalupe, esto en la colonia Las Alamedas, y más tarde la misma medida se hizo efectiva para poner fin a reuniones sociales con entre 10 y 15 personas que se realizaban en la vía pública.

La intervención de los inspectores municipales también se hizo efectiva en un domicilio particular de la colonia Eduardo Guerra, en calle N y avenida Séptima, para poner fin a una fiesta en la que participaban por lo menos 30 personas y que era amenizada con música en vivo, por lo que se procedió a levantar un acta de sanción.

Otra de las intervenciones se dio en el ejido San Antonio de los Bravos, en este caso para que concluyera una reunión en la que seis personas celebraban acompañadas de un grupo musical.