Torreón, Coahuila.- Elba Espinoza Vital, conocida como ‘Beba’, es una enfermera de 69 años de edad y con 52 de servicio en una pequeña comunidad denominada El Retiro, del municipio de San Pedro, Coahuila, que acudió este jueves a temprana hora al Hospital General de Torreón a aplicarse la vacuna del Covid-19 y que después de hacerlo mostró un semblante de satisfacción, resaltando que de ahora en adelante se sentirá mucho más segura para seguir realizando sus labores.
“Gracias a Dios ya recibí la vacuna, la verdad sentí mucho gusto al momento de aplicármela, gracias a Dios todo bien, ahora podré hacer mi trabajo con mayor seguridad, si así sin la vacuna, seguía trabajando con todos los cuidados requeridos, ahora imagínese ya con la vacuna, estoy lista para seguirle dando, yo les digo a todos mis compañeros de la salud que se la pongan, es muy necesaria”, manifestó ‘Beba’ mientras se recuperaba de la dosis recibida en su brazo izquierdo.
“Tengo 69 años de edad y 52 de servicio y no me he cansado gracias a Dios, no sé lo que es la jubilación todavía, trabajo con mucho gusto ahí en el ejido El Retiro del municipio de San Pedro y ahora con la vacuna me siento más confiada para seguir adelante, con la seguridad de que no voy a contagiarme”, agregó la enfermera de avanzada edad.
No todo fue satisfacción para Doña ‘Beba’, pues compartió que tiene una hermana que también es trabajadora de la salud y no pudo aplicarse la vacuna ya que presentó un alto nivel de glucosa, además de que tiene una hija que se contagió de Covid-19 y quedó con algunas secuelas: “mi hija trabaja en el Centro de Salud de San Pedro, se contagió ahí en la clínica y le quedó secuela, le bajó defensas y no puede hacer un ejercicio fuerte porque se agita y no me le han puesto la vacuna, quiero hablar de esto con la Dra. Quiroz que es mi jefa, porque la jefa de enfermeras mandó a otras en lugar de mandar a mi hija”.
