Ya se hacen notar los primeros avances de los trabajos de remozamiento que se realizan desde hace un par de semanas en la Plaza de Armas, uno de los principales Paseos Públicos de la ciudad, al tiempo que no se han descuidado los trabajos de mantenimiento que de manera permanente se llevan a cabo a lo largo del Paseo Morelos.

Así lo dio a conocer Antonio Loera López, titular de la Dirección de Servicios Administrativos del Ayuntamiento de Torreón, quien coordina una buena parte de los trabajos que se realizan desde el año pasado en materia de rescate y rehabilitación de espacios públicos.

En el caso de la Plaza de Armas, comentó que en unos días más habrán concluido las labores de restauración que incluyen la aplicación de pintura en bancas, arbotantes y herrería de los jardines, así como la reactivación de las fuentes, la limpieza y pulido del piso de granito, y, próximamente, la reposición de las piezas de cantera de la torre correspondiente al vistoso, con lo que solo quedará por reinstalar las esculturas que fueron donadas por la comunidad alemana en 1913 y que hace varios años se retiraron del lugar para quedar resguardadas en el Archivo Histórico.

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En cuanto al Paseo Morelos, el funcionario refiere que si bien el espacio presenta a lo largo de sus 17 manzanas algunas necesidades materiales qué atender, en realidad no hay nada que no se pueda resolver con los trabajos que de manera permanente se ejecutan a manera de mantenimiento, pues se trata básicamente de subsanar eventualmente las huellas del graffiti, esto con la aplicación de pintura, y de reponer los bolardos ornamentales y de iluminación que con frecuencia resultan dañados a causa de accidentes viales o en actos vandálicos.

Nada menos, en noviembre del año pasado fue necesario reponer un total aproximado a los 150 bolardos que faltaban a lo largo de la avenida Morelos, desde la Alameda Zaragoza hasta la Plaza de Armas.