La gente viene a este espacio a buscar nostalgia, ese recuerdo que lo conecta con las mejores etapas de su vida y la añoranza esos tiempos vividos; es el mercadito de artículos antiguos del Paseo Colón en Torreón, que se ubica cada domingo, sobre la calle Matamoros, entre Colón y Degollado.
En este lugar se encuentran todo tipo de antigüedades y los coleccionistas o ciudadanos en general, gustan de visitarlo para atraer hacia ellos todos esos recuerdos de décadas pasadas o quizá conectarse a través de su memoria con algún familiar.
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Por eso, para Fernando Reyes, quien tiene 10 años vendiendo antigüedades y piezas de colección cada domingo, es garantía conservar y conseguir estas piezas. “Siempre hay gente que se reconcilia con su pasado y aunque no son artículos de primera necesidad, sabemos que siempre hay objetos de este tipo que serán muy importantes para alguien”.
Don Fernando considera que tener a la mano el pasado, es algo que mentalmente siempre te da tranquilidad y todo repercute para bien en el bienestar de la persona.
La importancia de las antigüedades
Este tipo de objetos no pierde valor, por el contrario muchos van incrementando el mismo porque llegan a ser verdaderas piezas de colección que muchos están buscando.
De la relevancia del objeto o artículo, así como de la demanda del mismo, depende también el costo que se le va a dar. Muchos lo que tienen es un alto valor sentimental y eso los hace que se coticen mejor o en algunos casos, puede ser que el costo sea simbólico pero el valor para la persona sea muy por encima de éste.
“Nosotros también tenemos conexión con otros mercadillos de otros lugares como Argentina, Chile y diferentes partes del continente; sabemos que allá las piezas se cotizan bastante bien y no nos comparamos quizá con el mercado europeo, pero aquí en América, todas estas piezas tienen mucho valor”, comentó el señor Reyes.
La adquisición de piezas valiosas
Por su parte, Miguel Pinto es otra de las personas que acuden a este mercadito cada fin de semana a ofrecer sus piezas; consigue sus objetos en paseos por los ranchos donde la gente saca lo que ya no les sirve, las mismas personas mayores en ocasiones también le entregan o venden algunas antigüedades con las que cuentan en casa.
Muchas familias, cuando padres o abuelos mueren, suelen vender o donar sus artículos personales u objetos con los que contaban en sus casas y es una de las formas en las que personas como don Miguel, se hacen de piezas para vender.
Hay muchos objetos que la gente considera valiosos y que coleccionan, por lo tanto vienen a buscarlos. Algunos de estos son las monedas, planchas, quinqués, máquinas de escribir, teléfonos, muchos objetos de decoración.
“La gente que sabe ya nos busca, ya sabe qué tenemos y según lo que necesite o ande buscando ya saben también con quién llegar y buscar”.
Un mundo de objetos antiguos
Lo cierto es que hay diversidad y se puede encontrar toda clase de objetos y de diferente antigüedad; hay desde juguetes, monedas, libros, discos compactos, discos de acetato, teléfonos, cámaras fotográficas, de video, candados, llaves, vajillas, utensilios de cocina, cubiertos, planchas, sartenes, máquinas de escribir, espejos, lupas, carritos, objetos decorativos, campanas, candelabros, relojes, cuadros, lámparas, entre muchas otras opciones para los coleccionistas y amantes de las antigüedades.
