Torreón, Coahuila.- Debido a la contingencia del Covid-19, el riesgo que hay por la movilidad y el cierre de fronteras, cada vez son más los migrantes que deciden quedarse en Torreón para buscar un trabajo.
Se toman un tiempo en esta parte de México para estabilizarse, hacerse de recursos y luego partir hacia la frontera con Estados Unidos, cuando creen que la situación es más conveniente.
Javier Rodríguez, administrador del Centro de Día para Migrantes ´Jesús Torres Fraire´, reveló que a partir de la segunda quincena de marzo, que fue cuando se anunció lo de la cuarentena, seguía creciendo el número de ´buscadores del sueño americano´ que transitaban en La Laguna.
“Porque todavía no estaban muy bien enterados de lo que estaba sucediendo. Para abril ya empezó a bajar. En mayo se volvió a estabilizar un poco”, comentó.
“Varios han optado quedarse aquí en Torreón para buscar algún trabajo, incluso ha habido casos exitosos”, indicó.
Su permanencia puede constatarse, porque son los que regresan al Centro de Día a pedir algún tipo de apoyo, ya sea alimento, ropa, calzado o medicamento.
“Hay pocos migrantes nuevos, hay más visitas de los migrantes que se han estado quedando en la ciudad”, enfatizó.
La mayoría de los migrantes que pasan por La Laguna son de Honduras, seguidos por salvadoreños, guatemaltecos y nicaragüenses.
Cabe señalar que Estados Unidos ha sido uno de los países más golpeados a nivel mundial por el Covid-19, pues en el último reporte había más de 2.4 millones de personas contagiadas y más de 115 mil decesos.
Juan Higinio Tabares, es un hondureño de 41 de edad que lleva en Torreón dos semanas, quien decidió tomarse una pausa para seguir su trayecto porque si cruzar a Estados Unidos es ´muy complicado´, ahora con la pandemia más.
“Es la segunda vez que voy para allá. Ya estuve en el 2015. Me regresaron. Pero uno siempre vuelve a buscar mejores oportunidades. En mi país no las hay. No hay trabajo, no hay dinero, pero sí hay hambre y delincuencia”, mencionó.
“Aquí me quedé por todo esto de la contingencia, seguir representa un riesgo. Además me han dicho que hay mucha seguridad, mucha vigilancia para pasar del otro lado. Mientras aquí pido la caridad en las calles y lavo carros para poder sobrevivir”, finalizó.