La reducción de recursos a programas federales para necesidades urgentes como la creación de un Centro Psiquiátrico en La Laguna prácticamente se ha extinguido y deberá hacerse una intensa labor de sinergia para involucrar a la sociedad para cuando menos ampliar la capacidad del que ya se tiene en Parras de la Fuente, según confirmó el DIF Torreón durante el informe de resultados del mes de julio ante la comisión encargada de supervisar su desempeño por parte del Cabildo.
En un intento por contar con un área “ambulatoria” que permita la atención momentánea y probable canalización de enfermos que requieran un seguimiento formal y permanente, el organismo municipal, según su presidenta honoraria Astrid Casale de Zermeño Infante, se requiere de la ayuda económica de los torreonenses y de organismos privados para poder consolidar cuando menos al corto plazo, el proyecto de levantar la “carpa” que desde anteriores administraciones les fue cedida para su aprovechamiento.
Se trata de la estructura que sirvió como casino en la entrada a la colonia Los Angeles, por bulevar Independencia y calle Sertoma, misma que no han podido aprovechar por cuestiones técnicas aunque ya tiene la cimentación sobre la que se asentaría a un lado de Ciudad DIF que colinda con el Bosque Urbano. Pero sobre todo por falta de recursos económicos con todo y que este organismo ha sido de los más beneficiados presupuestalmente.
Todos tenemos que apoyar y sumar para el bien de la sociedad
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El tema saltó a discusión luego de la que la regidora priísta Isis Cepeda Villarreal y la síndica de vigilancia Dulce María Pereda Ezquerra preguntaron qué se hace para atender a los enfermos que requieren psiquiatría, que involucran problemas que rayan en el intento suicida, violentos y otros afectados por adicciones, en especial a drogas cuyo consumo es cada vez más evidente desde temprana edad.
María Aurora Martínez Guzmán, directora del DIF Municipal, aclaró durante su comparecencia en la reunión de comisión convocada por su presidenta Rosa Isela Gallegos Barbosa, que se trata de una atención profesional que con el dinero que aportan en ayuda a organismos de la sociedad civil como el “Centro Vida y Salud”; sirve, pero no alcanza a cubrir los tratamientos de fondo. Hay apertura para la consulta y en casos como el de la María de la Luz N., que fue público y notorio a nivel nacional, se le atendió dos meses, se le respaldó dos meses con algo de medicamentos y su familia tuvo que asumir la responsabilidad de mantener el tratamiento para evitar recaiga.
El tema de las adicciones es otro que va por el mismo rumbo de atención profunda, el de las adicciones que lamentablemente a quien más está atrapando o involucrando es a los menores de edad y su ataque incluye las áreas escolares por lo que se prevé un problema de alto riesgo en un futuro cercano. Por lo pronto el DIF ya está organizando un foro en el que participarán importantes representaciones oficiales en materia de salud y seguridad, a celebrarse tentativamente el 30 de abril del próximo año de la mano con la Universidad Iberoamericana en el que se darán a conocer datos duros sobre el avance de esta problemática.