Torreón, Coahuila.- Aunque reconoció que a pocos meses de que concluya la actual administración municipal ya comenzaron a surgir algunas inquietudes y pretensiones al respecto, el alcalde Jorge Zermeño Infante aseguró que no se ha contemplado hasta ahora realizar algún pago extraordinario a manera de bono de marcha para los funcionarios públicos e integrantes del Cabildo.
“Me lo han estado pidiendo, evidentemente hay personal inquieto”, dijo el munícipe, para enseguida puntualizar que hasta ahora no se ha llegado a considerar la posibilidad de hacer efectiva alguna indemnización extraordinaria para quienes, al igual que él, tendrán que dejar el servicio público después del 31 de diciembre.
Cuestionado sobre el tema, expuso por principio que los directores que forman parte de su equipo de trabajo ya han presentado sus renuncias.
Luego, explicó que algunos de los funcionarios que en menos de cuatro meses concluirán su encomienda, lo que pretenden es recuperar los recursos que se les rebajan de sus sueldos para canalizarlos a la Dirección de Pensiones.
En esos casos, el decreto que expidió la obligación que tienen los servidores públicos para hacer aportaciones al fondo de pensiones, establece para ellos la posibilidad de recuperar la mitad de los recursos, pero hay quienes han pedido que se le devuelva el 100 por ciento.
De acuerdo con Zermeño Infante, por lo que respecta a los integrantes del Cabildo la pretensión de una indemnización también ha quedado ya de manifiesto, sin embargo prefirió no abundar en comentarios. “claro que lo piden, pregúntales a ello, pero no está contemplado”, añadió únicamente.
De hecho, el alcalde evitó caer en críticas sobre ese tipo de intenciones, al plantear que no es su intención jugar con este tema porque en dentro del servicio público como en otros ámbitos la gente trabaja por necesidad, y cuando una administración concluye muchos terminas en sus casas desempleados, por lo que de alguna manera es entendible la preocupación que frente a ello puedan tener.