La Comisión Nacional del Agua (Conagua) accedió ya a modificar el trazo para avanzar en Torreón con una etapa más de los trabajos de instalación de la tubería principal de conducción del sistema Agua Saludable para La Laguna (ASL), con base en una propuesta que aunque aún no se presenta formalmente, de llegar concretarse no implicaría ningún tipo de afectaciones para la infraestructura vial y de servicios del periférico Raúl López Sánchez, y por lo tanto tampoco trastocaría ahí la dinámica del tránsito vehicular.
Se trata precisamente apenas de una propuesta que sólo ha sido esbozada en forma verbal, de manera que aún queda esperar a que se formalice por escrito, respaldada con la debida proyección técnica y con una planeación esquematizada que permita identificar posibles afectaciones temporales en vialidades e infraestructura de servicios que se deben prever para programar las medidas necesarias de atención y acompañamiento para amortiguar el impacto.
- Te puede interesar: Agua Saludable en riesgo de quedarse sin agua
En ese sentido, Juan Adolfo Von Bertrab Saracho, director de Obras Públicas en Torreón, quien considera un acierto que se deje al periférico fuera de esta obra, comentó que, si bien la intención ahora es que la instalación de un buen tramo de la tubería de ASL se realice sobre la margen derecha del lecho seco del río Nazas hacia el norte, se prevé también que en algún punto el trazo continúe luego avanzando por alguna vialidad, que podría ser el bulevar Centenario.
Por ello, dijo, es muy importante que la citada propuesta se concrete de manera formal y acompañada con toda la información que requiere el Municipio para poder extender los permisos necesarios, como también para poder acompañar de manera coordinada el desarrollo de los trabajos en las acciones de su competencia.
Como ya lo ha señalado en ocasiones anteriores, el funcionario reiteró que las autoridades municipales no están en contra del avance del proyecto de Agua Saludable para La Laguna, de manera que no es en lo absoluto su intención obstaculizar su realización, como pudiera pensarse.
Por el contrario, expuso, lo que se busca es respaldar la realización de las obras, pero dentro de un orden y con base en una planeación puntual que permita conocer previamente de qué manera se pueden afectar servicios y/o el tránsito vehicular, para poder establecer las acciones necesarias de atención y remediación, a favor de lo cual, insistió, es importante contar con toda la información inherente a los temas prioritarios de seguridad y responsabilidad civil.
Además, Von Bertrab comentó respecto a la parte de los trabajos que se pretende se realicen sobre o junto al cauce del Nazas, que por tratarse de una propiedad federal no se requeriría precisamente una autorización municipal, sin embargo debe entenderse que toda obra pública reglamentariamente sí debe contar con un permiso, en el cual debe asentarse el registro de un responsable de obra con el que en este caso las autoridades deben coordinarse para poder realizar las acciones complementarias que sean necesarias.
En tanto, lo que se sabe es que hasta ahora por parte de la Conagua o de las empresas a cargo de los trabajos de ASL, no han presentado la documentación y demás requisitos necesarios para poder obtener los permisos municipales necesarios.
Por su parte, el alcalde Román Alberto Cepeda consideró como un acierto el nuevo trazo que se estableció para continuar con la instalación de las tuberías de ASL sin afectar al periférico, al haberse atendido el sentido común y el “bien hacer”, luego que desde la designación de Juan Gabriel Riestra como nuevo director de Cuencas Centrales del Norte de la Conagua, ha procurado mantener una buena comunicación con él.
De hecho, dijo que en lo sucesivo esa comunicación será fundamental para la toma de acuerdos en relación con lo que viene para los próximos años en Torreón respecto a ASL, empezando por definir cuál va ser el costo que pagará el Municipio a cambio del agua proveniente del nuevo sistema, y especialmente para determinar si realmente será o no posible que se cuente con el respaldo de recursos federales para comenzar a trabajar en la necesaria reposición de los más de dos mil 500 kilómetros de tubería de conducción que existen en la ciudad, y que por su antigüedad tienen muchas fugas y deficiencias.